Abstract
En muchos aspectos ejerció Hobbes, con su pensamiento en las antípodas del
cartesianismo, una duradera influencia en Leibniz. Pero aunque Leibniz, como Hobbes,
pretende mecanizar la mente, no admite la negación hobbesiana de la sustancia
inmaterial, su disolución en el cuerpo. Por el contrario, quiere salvar el concepto de
mente. Para lograrlo le da la vuelta al argumento de Hobbes. Si este último define la
mente en términos de cuerpo, Leibniz va a considerar el cuerpo a partir de la mente.