Abstract
Los movimientos #MeToo de Hollywood, #YoSiTeCreo de España y #MiraComoNosPonemos de
Argentina son el punto de partida de una transición promovida por el movimiento feminista. Esta
transición está dirigida a una sociedad justa en la que las mujeres no sean víctimas de violación y
acoso que, además, quedan impunes. La perpetración de los males que estos movimientos
buscan eliminar ha sido posible hasta ahora, entre otras cosas, dado el déficit de credibilidad que
afecta a las mujeres que denuncian tales delitos.
En este artículo, me centraré en el caso de la injusticia testimonial y trataré de responder la
pregunta sobre qué requiere la transición de una sociedad con altos niveles de injusticia
testimonial a una sociedad epistémicamente justa. Para hacerlo, en la Sección 1 trataré de
especificar el tipo de mal que implica la injusticia testimonial. En la Sección 2 mostraré que la
injusticia testimonial, como una especie de dominación estructural, consiste en una desviación del
umbral de la justicia diferente de los dos tipos citados habitualmente. Por lo tanto, la dominación
estructural constituye un tipo de injusticia diferente de la desviación del umbral de la justicia
debido a la acción incorrecta de un agente o agencia y la desviación debido a factores arbitrarios
como la lotería genética. Sin embargo, comparte similitudes con ambos tipos de desviaciones. En
la Sección 3 analizaré las particularidades de la justicia de transición epistémica, explorando los
puntos de conexión con otros casos de justicia de transición y tratando de especificar el
tratamiento que debe recibirse en la transición, las expectativas de las víctimas de esta injusticia,
sus beneficiarios y el resto. de la gente. En la Sección 4 presentaré algunas reformas
institucionales que podrían implicar la transición a una sociedad con justicia testimonial. Estas
reformas constituyen el siguiente paso en la transición promovida por el movimiento feminista.