Abstract
La termodinámica, se desarrolló en gran medida bajo el impulso de la Revolución Industrial, que ayudó a afianzar metodológicamente las seculares investigaciones sobre el calor y la temperatura. Como tal desarrollo se produjo a la sombra de la triunfante mecánica clásica —cuyos referentes físicos son notablemente distintos— y a causa de la carencia de herramientas formales adecuadas, durante mucho tiempo se admitió sin discusión que esta ciencia había de limitarse a los sistemas en equilibrio o muy cercanos a él. En el presente artículo se exponen tanto el desarrollo histórico como las premisas intelectuales de semejante opción epistemológica, señalando el cambio de perspectiva ocurrido en la segunda mitad del siglo XX.