Abstract
El artículo reconstruye sucintamente, en primer lugar, la historia de la llamada teoría de los climas desde la Antigüedad hasta la Ilustración, prestando especial atención a las ideas de Hipócrates, Aristóteles y Montesquieu. Se demuestra, en segundo lugar, cómo dicha teoría es revaluada al rango de mitología científica en virtud de la nueva configuración epistemológica que la geografía y la climatología adquirieron en el siglo xix. En tercer lugar, se postula que, a pesar de la crisis de su estatuto científico, la teoría de los climas no desapareció en sus efectos, sino que antes bien sobrevivió en
la organización colonial y en la construcción ideológica de la hegemonía occidental. Finalmente, a través de un análisis de la categoría «medio» se muestra cómo las relaciones entre el ser humano y sus condiciones geográficas se desarrollan en forma de un rico entramado de influencias que permiten postular una nueva comprensión ética y estética de dicha relación.