Abstract
La sociedad católica de la vigésima centuria, en su propósito de ilustrar el alcance de la filosofía en la doctrina revelada, aboga por una injerencia del corpus clásico griego en la fe. Este es un problema que tuvo grandes repercusiones en cuanto a sostener la existencia de una philosophia christiana, tesis esta que emerge de la clásica cuestión de la relación fides et ratio. De manera que, el presente artículo, expone las razones que llevaron a los pensadores cristianos de antaño al uso de ideas filosóficas y algunos ejemplos que refieren la situación.