Political fact-checkers evaluate the truthfulness of politicians’ claims. This paper contributes to an emerging scholarly debate on whether fact-checkers treat political parties differently in a systematic manner depending on their ideology (bias). We first examine the available approaches to analyze bias and then present a new approach in two steps. First, we propose a logistic regression model to analyze the outcomes of fact-checks and calculate how likely each political party will obtain a truth score. We test our model with a (...) sample of fact-checks from Newtral, a major Spanish fact-checker. Our model would signal bias under two assumptions: a) all political parties are on average equally accurate in their statements; b) the verification method gives precise instructions and is implemented systematically. We investigate this second assumption with a series of interviews with Newtral fact-checkers. We show that standard verification protocols are so loosely implemented that fact-checks reflect a set of journalistic decisions, rather than a bias in the statistical sense. We call for a more rigorous definition of verification methods as a pre-requisite for an unbiased assessment of politician’s claims. (shrink)

Este artículo explora la relación entre la filosofía del límite de Eugenio Trías y el sufismo de Ibn ʿArabī. En primer lugar, pretende explicar la función de la filosofía de la religión en el sistema triasiano y por qué el maestro andalusí ocupa un lugar privilegiado en ella. Segundo, se ocupa de algunos aspectos esenciales de la doctrina akbarí que la filosofía del límite obtura, como la declaración de la unidad del Ser (tawḥīd), la conjugación de lo exotérico y lo (...) esotérico, la superación de la propia creencia, el camino de la servidumbre (ʿubūdiyya), el tránsito de la pasión súbita de amor (hawā) al amor espiritual (ḥubb), la caballería espiritual (futuwwa) y la morada de la no-morada (maqām lā maqām), los cuales comparten un nexo común: el trascendimiento de lo egoico y el interés en el otro en tanto otro. Finalmente, se defenderá que la obturación triasiana se debe tanto al influjo de Henry Corbin, como sobre todo, a las propias limitaciones de su proyecto filosófico, para el que el Ibn ʿArabī ausente constituye una suerte de sombra. (shrink)

Se ofrece una interpretación de la filosofía política de María Zambrano desde el sufismo deIbnʿArabī. Primero, explicaremos tres nociones centrales en la obra del Šayḫ, como la doble fidelidad a la dimensión de la «incomparabilidad» (tanzīh) y de la «similaridad» (tašbīh), la «nueva creación» (ḫalq al-ǧadīd) y el «hombre perfecto» (insān al-kāmil). Después, trataremos algunos de los textos más políticos de Zambrano, como Horizonte del liberalismo(1929), Isla de Puerto Rico (1940), «Martí, camino de su muerte» (1953) y Persona y democracia (...) (1958). Según veremos, el marco ontológico, epistemológico y antropológicodel maestro andalusí permite ahondar en el sentido místico del discurso político zambraniano. (shrink)

[español] En primer lugar, el texto ofrece un acercamiento al papel que amor y nostalgia cumplen en la poesía de Emilio Prados, así como a su íntimo nexo con la muerte como aniquilación mística. Como herramienta interpetativa, recurriré a la razón poética de María Zambrano, autora profundamente emparentada, vital y teóricamente, con la poesía pradiana. Este enfoque permitirá una visión de conjunto sobre la obra del poeta español y en segundo lugar, trazar una comparativa con el saudosismo de Teixeira de (...) Pascoaes. Así, indicaré las numerosas coincidencias que existen entre ambos y me detendré en la cuestión de la muerte mística, ámbito más problemático, donde sin embargo, puede apreciarse una comunión de espíritu entre el español y el portugués. ****************** [english] Firstly, the text offers an approach to the function of love and nostalgia in the poetry of Emilio Prados, as much as its intimate connection with death as mystical annihilation. As interpretive tool, I will use the poetic reason of María Zambrano, an author deeply linked, vital and theoretically, with pradian poetry. This focus will provide an overall view of Prado's work and the possibility of a comparison with Teixeira de Pascoaes's saudosism. Thus, I will point same coincidences between them and I will consider the question of mystical death. This sphere, although it is problematic, can show some kind of community of spirit between both. (shrink)

El presente artículo trata la presentación que Henry Corbin hace del sufismo de Ibn ' Arabī. Pretende mostrar cómo el proyecto filosófico del pensador francés (atravesado de protestantismo, heideggerianismo y fenomenología) produce una obturación de la doctrina akbarí, que denota cierta falta de amor o desinterésen la alteridad en tanto alteridad. El itinerario constará de cinco pasos. Primero, nos acercaremos a los años de formación de Corbin. Segundo, presentaremo salgunos puntos esenciales de su obra más célebre, La imaginación creadora en (...) el sufismo de Ibn ‘Arabî. Tercero, se mostrarán aquellos aspectos de la doctrinade Ibn ' Arabī allí obturados. Cuarto, expondremos algunas conclusiones a partir de estas ausencias. Quinto, a modo de epílogo, y ya en el ámbito de la filosofía latinoamericana, ofreceremos una mirada al proyecto de la transmodernidad de Enrique Dussel, desde el paradigma del amor akbarí. (shrink)

Resumen: El texto pretende un acercamiento al carácter amoroso de la escritura de Maria Gabriela Llansol. Explica cómo ésta, igual que la de María Zambrano, lleva la defensa amorosa del devenir de Nietzsche un paso más allá, en tanto nace de un interés por la otredad en sí misma y no de una voluntad de autoafirmación. La ruptura de las nociones convencionales de tiempo, espacio e identidad será una de las vías que utiliza. En ello puede apreciarse cierta similitud con (...) Muḥyī al-Dīn Ibn ʿArabī, de quien aprendió la necesidad de buscar un tiempo propio para el alma, diferente del cuantitativo y cuya doctrina del amor y de la santidad exige un genuino interés en la otredad en tanto otredad. -/- Abstract: The text is an attempt to approach the loving character of the writing of Maria Gabriela Llansol. It explains how her works, similarly to those of María Zambrano, go further than Nietzsche in the affirmation of the becoming: as long as there is not will of self-affirmation, but an authentic interest in alterity. One of the paths she explores is to break the conventional notions of time, space and identity. It is possible to appreciate two coincidences with Muḥyī al-Dīn Ibn ʿArabī. First, Llansol learned from him the need of an own time for the soul, different from quantitative time. Second, Ibn ʿArabī’s doctrine of love and sainthood also implies a genuine interest in otherness as otherness. (shrink)

‘...if you learn to think like Peter Cave – with freshness, humour, objectivity and penetration – you will have been amply rewarded.’ :::: Prof. Felipe Fernandez-Armesto, University of Notre Dame __________________ Chapter Titles:>>> ___ 1 Lao Tzu: The Way to Tao >>> 2 Sappho: Lover >>> 3 Zeno of Elea: Tortoise Backer, Parmenidean Helper >>> 4 Gadfly: aka ‘Socrates’ >>> 5 Plato: Charioteer, Magnificent Footnote Inspirer – ‘Nobody Does It Better’ >>> 6 Aristotle: Earth-Bound, Walking >>> 7 Epicurus: Gardener, Curing (...) the Soul, Ably Assisted by Lucretius >>> 8 Avicenna: Flying Man, Unifier >>> 9 Descartes: With Princess, With Queen >>> 10 Spinoza: God-Intoxicated Atheist >>> 11 Leibniz: Monad Man >>> 12 Bishop Berkeley, ‘That Paradoxical Irishman’: Immaterialist, Tar-Water Advocate >>> 13 David Hume: The Great Infidel or Le Bon David >>> 14 Kant: Duty Calls, Categorically >>> 15 Schopenhauer: Pessimism With Flute >>> 16 John Stuart Mill: Utility Man, With Harriet, Soul-Mate >>> 17 Søren Kierkegaard: Who? >>> 18 Karl Marx: Hegelian, Freedom-Fighter >>> 19 Lewis Carroll: Curiouser and Curiouser >>> 20 Nietzsche: God-Slaying Jester, Trans-Valuer >>>> 21 Bertrand Russell: Radical, Aristocrat >>> 22 G. E. Moore: Common-Sense Defender, Bloomsbury’s Sage >>> 23 Heidegger: Hyphenater >>> 24 Jean-Paul Sartre: Existentialist, Novelist, French >>> 25 Simone Weil: Refuser and Would-Be Rescuer >>> 26 Simone de Beauvoir: Situated, Protester, Feminist >>> 27 Ludwig Wittgenstein: Therapist >>> 28 Hannah Arendt: Controversialist, Journalist? >>> 29 Iris Murdoch: Attender >>> 30 Samuel Beckett: Not I >>>. (shrink)

INTRODUÇÃO O anestro pós-parto é o período após o parto no qual a fêmea não apresenta ciclos estrais (atividade cíclica). Na vaca leiteira, o parto é seguido de um período de inatividade ovariana de duração variável, que é principalmente afetada pelo estado nutricional, produção leiteira, ganho ou perda de condição corporal antes e depois do parto, e por condições patológicas como hipoplasia dos ovários, cistos ovarianos, mumificação uterina, piometra entre outras, além, também, de condições ambientais como instalações que podem causar (...) estresse etc. 1. Controle neuroendócrino do anestro Entre os 12 e 15 dias pós-parto, as células gonadotróficas presentes na adenohipófise começam a produzir e secretar o FSH (hormônio folículo estimulante), o qual estimula a primeira onda folicular; entretanto, nenhum folículo dominante do(s) ovário(s) chega a completar seu desenvolvimento devido à carência de estímulo apropriado do LH (hormônio luteinizante) que também é produzido pelas mesmas células e que deve estar presente em altas concentrações. Nas 2 primeiras semanas pós-parto (primeiros 15 dias), as concentrações circulantes de LH são baixas, o que se deve à ausência de reservas do LH e à incapacidade temporal da hipófise para responder ao estímulo da GnRH (hormônio liberador de gonadotrofina). Entre os dias 15 e 20 pós-parto, a hipófise aumenta a sua capacidade para responder ao GnRH; entretanto, o estabelecimento do padrão de secreção do LH adequado para estimular a maturação e a ovulação do folículo dominante das primeiras ondas foliculares depende fundamentalmente do balanço energético. 2. Fatores que determinam o início da atividade ovariana pós-parto Na vaca leiteira, é frequente que algum dos primeiros folículos dominantes que se desenvolvem durante as primeiras duas ou três semanas complete a sua maturação e chegue à ovulação, isto é, madure e ovule. O fator limitante para o reinício da atividade ovariana é o balanço energético negativo (BEN). No gado leiteiro, o consumo de matéria seca (CMS), após o parto, deverá ser aumentado em até quatro vezes, para cobrir a demanda de nutrientes para a produção de leite e mantença; no entanto, a vaca é incapaz de consumir a exigência de matéria seca, por isso recorre a suas reservas de gordura e proteína, e cai em BEN. As vacas que consomem menos matéria seca, produzem menos leite, têm um BEN mais profundo e o período do parto à primeira ovulação é maior. O nível mais baixo do BEN é alcançado entre os 10 a 20 dias pós-parto e a vaca continua em BEN até os 70 a 80 dias pós-parto e, em alguns casos, até aos 100 dias pós-parto (vacas primíparas). Entretanto, mesmo com BEN, uma proporção elevada das vacas inicia sua atividade ovariana normal nas primeiras 8 semanas pós-parto. As vacas que alcançam um nível baixo de BEN rapidamente e saem deste ponto mínimo de forma rápida, iniciam sua atividade ovariana mais rápido também (20 a 30 dias pós-parto) do que aquelas que têm um BEN mais profundo e duradouro, essas muitas vezes permanecem em anestro aos 70 dias pós-parto (figura 1). As mudanças na condição corporal estão correlacionadas positivamente com as concentrações séricas de insulina, IGF-I e leptina; assim, a maior qualificação da condição corporal é maior mediante a concentração sérica desses hormônios, que atuam principalmente como sinais que chegam ao hipotálamo e modificam a frequência de secreção do GnRH e, consequentemente, de LH. A leptina é um hormônio que é produzido pelos adipócitos e tem sido proposto que sua concentração é o sinal mais importante de alterações de condição corporal. A transição do anestro para a ciclicidade coincide com um aumento das concentrações séricas de insulina, IGF-I e leptina. Além das mensagens dadas pelos hormônios supracitados, outras substâncias presentes no sangue fornecem informações sobre o estado metabólico do animal. Por exemplo, os ácidos graxos não esterificados e o β-hidroxibutirato são indicadores da mobilização e utilização da gordura corporal; assim, o aumento destas substâncias proporciona uma mensagem inibidora de reprodução. O intervalo médio entre o parto e a primeira ovulação, em vacas leiteiras em sistemas de produção não intensiva, é em torno de 30 dias; enquanto em vacas em sistemas de produção intensiva, é de 40 dias. Deve-se sinalar que é comum aos 70 dias pós-parto, que 20% das vacas ainda não ovulem. Verifica-se frequentemente que as vacas leiteiras desenvolvem folículos que crescem mais que os folículos ovulatórios, os quais convertem em cistos foliculares. Esta condição está associada com insensibilidade do hipotálamo ao retorno positivo do estradiol, o que não desencadeia o pico pré-ovulatório de LH (figura 2). 3. O corpo lúteo dos primeiros ciclos pós-parto Durante um ciclo estral o corpo lúteo tem uma meia-vida fisiológica de 12 a 14 dias; no entanto, na primeira ovulação pós-parto cerca de 25% das vacas desenvolvem corpos lúteos de vida curta (<10 dias), 30% de vida longa (21 a 50 dias) e 45% da vida normal (11 a 20 dias). A regressão prematura do corpo lúteo é uma condição frequente nos ruminantes no primeiro ciclo estral, da transição do anestro à ciclicidade. Ou seja, na vaca é frequente que no primeiro ciclo de pós-parto e da puberdade sejam ciclos curtos; isto deve-se à liberação antecipada da PGF2α. Por outro lado, a causa dos corpos lúteos de vida longa (corpos lúteos persistentes) não é clara, mas está relacionada com alterações na secreção da PGF2α devido a infecções uterinas (tabela 1). 4. Anestro patológico 4.1 Alterações do aparelho genital que causam anestro Na vaca foi calculado que as alterações do aparelho genital que afetam a atividade ovariana representam apenas 10% do total das causas de anestro. Entre as alterações do aparelho genital se encontram os cistos foliculares, cistos luteinizados, aplasia segmentar, piometra e mumificação fetal. . 4.2 Cistos foliculares Os cistos foliculares são a patologia ovariana mais comum nos bovinos leiteiros, causando perdas econômicas devido ao atraso do período do parto ao primeiro serviço, pelo custo dos tratamentos e pelo risco que têm as vacas de serem descartadas. A incidência aumentou à medida que a produção de leite se intensificou. Entre 5 e 30% das vacas desenvolvem cistos foliculares nos primeiros 60 dias do pós-parto; no entanto, cerca de 60% destas se recuperam espontaneamente. Sinais clínicos de vacas com cistos foliculares descritos na literatura são: ninfomania, ciclos curtos, masculinização e relaxamento dos ligamentos pélvicos. Atualmente uma alta proporção de vacas com cistos foliculares apresentam anestro. Por muitos anos um cisto folicular foi definido como um folículo com um diâmetro de 2,5 mm, presente em um ou em ambos os ovários durante um período mínimo de 10 dias, na ausência de um corpo lúteo. Os conhecimentos atuais modificaram o conceito clássico; assim, nem todos os cistos foliculares têm um diâmetro de 2,5 mm; além disso, alguns podem persistir mais de 10 dias. Outros são estruturas dinâmicas, que sofrem regressão e podem ser substituídas por novos cistos. Por esta razão, a definição mais precisa e técnica de um cisto folicular é: folículo de um diâmetro, de pelo menos 20 mm, que está presente em um ou ambos os ovários na ausência de tecido lúteo que interfere com o ciclo estral normal (figura 3). A patogênese dos cistos foliculares não é conhecida. Propõe-se que as vacas que desenvolvem esta patologia têm uma anomalia nos mecanismos de retroalimentação entre o hipotálamo e a hipófise, em conjunto com uma disfunção a nível folicular. É pesquisado e sugerido que em vacas com cistos foliculares, o pico pré-ovulatório de LH não ocorre ou é de menor amplitude, ou não tem uma relação síncrona com o amadurecimento do folículo, o que provoca a falha ovulatória. A alteração na secreção de LH pode obedecer a falta de sensibilidade do hipotálamo ao feedback positivo de estrogênio. Observa-se também que algumas anormalidades a nível folicular, tais como alterações na síntese de hormônios esteroides e uma menor sensibilidade à LH, podem contribuir com a patogenia. Uma vez que o cisto folicular foi estabelecido, observou-se um aumento na frequência de secreção pulsátil de LH, o que contribui com a persistência desta patologia. Existem fatores associados com a incidência de cistos foliculares que, de acordo com a patogenia proposta, podem influenciar ao nível do eixo hipotálamo-hipófise-ovário. Os cistos foliculares ocorrem principalmente durante a transição do anestro pós-parto para a ciclicidade. Neste período as vacas estão em BEN, e tem sido observado que as vacas que sofrem de um BEN mais profundo tendem a apresentar uma incidência maior de cistos foliculares. Por outra parte, há uma correlação positiva entre a produção de leite e a incidência de cistos, o que indica que as vacas que produzem mais leite têm maior risco de sofrer com esta patologia. Também existem outros fatores relacionados com a incidência de cistos foliculares tais como estresse, genéticos, infecções uterinas, estresse calórico e presença de fitoestrogênios na dieta (tabela 2). O tratamento indicado consiste na administração do GnRH, que provoca a luteinização do cisto. É recomendável a combinação com uma dose luteolítica de PGF2α, 7 a 10 dias depois da injeção de GnRH. Também é indicado o tratamento com hCG em vez de GnRH. Em alguns estudos foi possível integrar vacas com cistos foliculares em programas de sincronização da ovulação e inseminação em tempo fixo, com resultados aceitáveis de fertilidade (figura 4). 4.3 Cistos luteinizados Esse tipo de cisto pode se desenvolver a partir de um cisto folicular, também ocorre quando o saco libera um óvulo e, em seguida, se fecha novamente e enche-se de líquido. O tecido luteinizado produz progestágenos do qual os sinais incluem anestro persistente. São bastante mais raros e originam-se pelo contínuo aumento do espaço cavitário central normalmente existente nos corpos lúteos (figura 5). Normalmente, a parede do cisto contém células lúteogranulosas grandes e células tecaluteais pequenas. Se diferenciam com dificuldade de corpos lúteos recém-formados durante o período em que ainda possuem um antro. Os cistos luteínicos únicos, pelo menos os menores, necessitam de importância clínica. Se os cistos são funcionais, a sintomatologia mais destacada é o anestro ou pseudogestação. É preciso lembrar que esses cistos agem como uma fonte de secreção contínua de progesterona, diminuindo assim a resistência do útero a infecções, podendo desencadear-se uma endometrite (figura 6). Se eles forem diagnosticados é recomendável a administração de PGF2α. 4.4 Aplasia segmentar As vacas com esta condição podem gestar quando a ovulação ocorre do lado do corno uterino presente. Se a ovulação acontece do lado onde falta o corno uterino causa anestro. 4.5 Piometra A piometra, por definição, é a acumulação de material purulento no interior da luz uterina que ocorrem geralmente durante ou imediatamente após o período de domínio da progesterona. É uma condição que ocorre mais frequentemente nos primeiros 30 dias pós-parto; no entanto, algumas vacas em anestro que são revisadas no dia 50 pós-parto chegam a ter piometra. O tratamento indicado consiste na administração de PGF2α. 5. Anestro relacionado com o tempo de serviço O anestro em bovinos também é classificado como anestro pré-serviço e pós-serviço. 5.1 Anestro pré-serviço Inclui vacas e novilhas que não tenham mostrado estro, isto é, manifestado cio, no período em que devem ser servidas. Em alguns estudos observou-se que o anestro antes do serviço pode afetar até 50% das vacas elegíveis para apresentar estro. 5.1 Anestro pós-serviço Neste grupo incluem-se as vacas que não retornam ao estro, ou seja, que não retornaram ao cio, 21 dias depois da inseminação e não estão prenhes. Essas vacas são conhecidas como vacas fantasma (The Phantom Cow). A causa principal do atraso do retorno ao estro é a baixa eficiência na detecção de estros; mas também foram descritas outras causas como: inseminação em um estro anovulatório, inseminação em tempo fixo em vacas em anestro, suspensão da ciclicidade após o serviço, fases lúteas longas e morte embrionária. O diagnóstico precoce da gestação é de grande ajuda para conhecer oportunamente o número de fêmeas que não estão prenhes. A ecografia no trigésimo dia pós-inseminação adianta, pelo menos 10 dias, a ressincronização de vacas vazias. 6. Falso anestro ou anestro funcional Este causa as maiores perdas econômicas de caráter reprodutivo em rebanhos leiteiros, e refere-se às vacas que estão ciclando, mas não são observadas em estro pelos trabalhadores. É um dos maiores problemas dentro de um sistema de criação extensivo e, às vezes, semiintensivo, uma vez que é de suma importância a observação técnica e precisa do comportamento da vaca para observar o possível retorno ao cio ou não. 7. Manejo da vaca anéstrica A probabilidade de que a vaca seja inseminada oportunamente depende da eficiência da detecção de estros. É comum que a metade das vacas apresentem estro e não sejam observadas, por essa razão, muitas não são inseminadas uma vez que termina o período de espera voluntária. Por outro lado, há vacas que, por causas patológicas ou por seu estado metabólico, ainda estão em anestro depois que termina o período voluntário de espera. Para identificar as causas da ausência de estros, todas as vacas que não tenham sido inseminadas no dia 60 pós-parto, devem ser revisadas por via retal para aplicar o tratamento ou manejo pertinentes. Durante esta revisão é dada especial atenção às características do útero e nas estruturas ovarianas, já que daqui depende o manejo subsequente. A palpação começa no útero; neste é importante determinar se não há gestação. Posteriormente, avalia-se sua consistência que pode ser normal, edematosa ou turgente. Depois de avaliar o útero procede-se a palpação dos ovários, começando com o direito e, em seguida, esquerdo. Abaixo estão descritas as diferentes descobertas que podem ser encontradas na literatura e seu tratamento ou manejo. O registo dos resultados à palpação é feito através de chaves reprodutivas. 7.1 UN CLD2-3 FE10 Útero normal (UN) com um corpo lúteo 2 ou 3 no ovário direito (CLD2-3) e um folículo no ovário esquerdo de 10 mm de diâmetro (FE10). A consistência normal do útero (é normal quando não há edema ou turgescência) é encontrado em vacas não prenhes durante o diestro, ou em vacas que estão em anestro. O CL 2 ou 3 é uma estrutura bem desenvolvida que deforma o ovário e em alguns casos representa mais de 50% da massa ovariana. Classificá-los como CL 2 ou 3 é uma apreciação subjetiva do tamanho do corpo lúteo e não tem significado prático, pois em qualquer dos casos o manejo é o mesmo. O CL indica que a vaca está em qualquer dia do diestro e, obviamente, indica que está ciclando. Durante o diestro pode-se encontrar folículos de tamanho diferente em qualquer um dos dois ovários, já que este depende das ondas de desenvolvimento folicular. É importante frisar que as estruturas mencionadas podem estar em ovários diferentes ou no mesmo ovário. O achado mais importante nesta fase é a presença do corpo lúteo o que permite o tratamento com a PGF2α, o que resulta na apresentação do estro nas próximas 48 a 120 horas. A presença de um corpo lúteo é o estado fisiológico que é mais frequentemente encontrado neste grupo de vacas, primeiro porque paradoxalmente a maior proporção de vacas em “anestro” está ciclando (anestro funcional) e, em segundo lugar, porque o diestro ocupa 65% dos dias do ciclo estral. 7.2 UE CLD1 FE10-15 Útero edematoso (UE) com um corpo lúteo 1 no ovário direito (CLD1) e um folículo 10 ou 15 mm de diâmetro no ovário esquerdo. O útero edematoso pode ser encontrado no proestro e metaestro. A presença do CL1 e um folículo grande indica que se trata de uma vaca que muito provavelmente é encontrado em proestro. A diferença entre um CL1 e um CL 2 ou 3 é basicamente o seu tamanho; um CL1 é uma estrutura pequena com consistência dura. As vacas que têm estas características devem ser marcadas para que os trabalhadores prestem mais atenção, já que apresentarão o estro nas próximas 48 a 72 horas. Se a vaca não apresentar estro nesse período, deverá ser palpada na semana seguinte. 7.3 UT DE FE10-15 Útero túrgido ou tonificado, ovário direito estático e ovário esquerdo com um folículo de 10 ou 15 mm de diâmetro. Estes achados, além da presença de muco estral, correspondem a uma vaca em estro. Frequentemente, na palpação das vacas do grupo de anestro, há vacas em estro; estas vacas deverão ser programadas para inseminação. 7.4 UE DE EE Útero estático e ovários estáticos. Estas observações correspondem a uma vaca em metaestro; esta decisão tem uma alta margem de erro uma vez que também pode corresponder a um animal no proestro ou em anestro verdadeiro. Um achado que permite ser mais bem sucedido no diagnóstico é a presença de sangue no muco cervical; neste caso, a presença de sangue indica, com certeza, que a vaca está em metaestro; no entanto, nem todas as vacas apresentam este sangramento. As vacas com estes achados devem ser palpadas sete dias depois para confirmar ou corrigir um primeiro diagnóstico. Se a primeira palpação foi correta, na segunda se encontrará um CL2-3. 7.5 UE CHD FE10 Útero edematoso, com corpo hemorrágico no ovário direito (CHD) e com folículo de 10 mm de diâmetro no ovário esquerdo. Estas observações são de uma vaca em metaestro. O corpo hemorrágico é considerado como a fase de transição entre o folículo e o corpo lúteo; o CH é palpado como uma estrutura com uma saliência em forma de papila e é muito suave ao toque. Será necessário esperar 4 ou 5 dias para que se converta num corpo lúteo maduro e assim destruí-lo com PGF2α. Na rotina, estas vacas são palpadas na seguinte revisão (sete dias depois). 7.6 UN DE EE Útero normal e ovários estáticos. Este caracteriza as vacas que estão no anestro verdadeiro. As vacas caem no anestro principalmente por se encontrar em balanço negativo de energia; este problema é mais grave em vacas de primeiro parto. O único tratamento eficaz consiste em melhorar o seu estado metabólico. Tratamentos hormonais não funcionam caso não seja resolvido primeiro o seu estado nutricional. 7.7 UN CFD EE Útero normal, cisto folicular no ovário direito e ovário esquerdo estático. Embora as vacas com cistos foliculares sejam caracterizadas por apresentar estros recorrentes, também chegam a apresentar anestro. O tratamento consiste na administração do GnRH ou hCG. 7.8 UN CLD EE Útero normal, cisto luteinizado no ovário direito e ovário esquerdo estático. Este cisto também é causado por uma deficiência na secreção de LH, só que neste caso a deficiência foi parcial, o que provoca um certo grau de luteinização. O cisto luteinizado é uma estrutura com mais de 20 mm de diâmetro de paredes grossas. O tratamento indicado é a administração de PGF2α. Na prática, é difícil diferenciar um cisto folicular de um luteinizado, pelo que o tratamento recomendado é, primeiro, a administração de GnRH ou hCG e sete dias depois é injetado PGF2α (figura 7). 7.9 Piometra CLD2-3 FE A piometra é uma condição que ocorre principalmente nos primeiros 30 dias pós-parto; no entanto, na revisão das vacas anéstricas são encontradas vacas com esta patologia. O tratamento indicado consiste na administração de PGF2α. 8. Tratamentos hormonais para indução da atividade ovariana O estabelecimento precoce da ciclicidade pós-parto favorece a involução uterina e está positivamente correlacionado com a fertilidade; ou seja, quanto mais ciclos estrais a vaca tenha antes da primeira inseminação, a percentagem de concepção é maior. Um tratamento utilizado para induzir a primeira ovulação pós-parto em vacas anéstricas, consiste na administração de GnRH quando à palpação retal se encontra um folículo grande (> 10 mm). Com isso se pretende fazer o folículo ovular e depois injeta-se PGF2α para provocar a regressão lútea. Outras combinações consistem na administração de GnRH e na inserção de dispositivos de liberação de progesterona e, ao retirar o progestágeno, injeta-se PGF2α (figura 8). No entanto, os tratamentos mencionados são de uso comum, não funcionam em todos os casos. Um requisito para se obter êxito é que as vacas devem ter boa condição corporal ou que estejam ganhando condição corporal. Embora os tratamentos hormonais possam ajudar em alguns casos, não deve-se esquecer que as causas do anestro não são corrigidos apenas com a administração de hormônios, já que a vaca não cicla porque toda a informação do estado metabólico que recebe o cérebro, indica que não o deve fazer. 9. Gonadotropina coriônica equina (eCG) Na égua, por volta do dia 30 de gestação, células do córion migram para o endométrio e formam umas estruturas conhecidas como copas endometriais. Entre o dia 40 e o dia 130 de gestação nestas estruturas é produzido o eCG (anteriormente conhecida como gonadotropina sérica da égua prenha ou PMSG, pela sua abreviatura em inglês). Na égua esse hormônio tem atividade de LH pelo qual estimula a função do corpo lúteo e promove a formação de corpos lúteos acessórios. Nos ruminantes, o eCG se une aos receptores de LH e FSH do folículo, estimulando o desenvolvimento folicular, e no corpo lúteo estimula a secreção de progesterona. O eCG tem sido utilizado com a finalidade de superovulação e em vacas de corte sob anestro é incluído em programas com progestágenos para induzir ciclicidade. Nestes programas é injetado eCG no momento da remoção do progestágeno, o que favorece o desenvolvimento folicular e apresentação do estro. Em rebanhos leiteiros na Nova Zelândia tem sido incrementado a taxa de prenhez sem aumentar a proporção de partos gêmeos, através da injeção de eCG na remoção do dispositivo de libertação de progesterona em programas combinados com a injeção de benzoato de estradiol. RESUMO ➢ Transcorrem 15 dias pós-parto para que a hipófase responda ao hormônio GnRH. ➢ Entre os dias 12 e 15 pós-parto começa-se a secreção de FSH e iniciam as ondas foliculares. ➢ As vacas chegam ao ponto mais baixo de BEN entre os dias 15 e 20 pós-parto. ➢ As vacas iniciam a atividade ovariana normal, em média, após os 40 dias pós-parto. ➢ Aos 70 dias pós-parto é normal que 20% das vacas ainda estejam em anestro. ➢ Na primeira ovulação pós-parto 25% das vacas desenvolvem corpos lúteos de vida curta e 30% mostram corpos lúteos de vida longa (persistentes). ➢ As anormalidades do aparelho reprodutor são responsáveis por 10% das causas de anestro. ➢ 5 a 30% das vacas desenvolvem cistos foliculares nos primeiros 60 dias pós-parto e 60% destas se recuperam de forma espontânea. ➢ No dia 30 pós-inseminação é possível identificar vacas vazias mediante a ecografia e reservá-las para a ressincronização. ➢ A proteína B específica da gestação aparece no soro a partir do 15º dia de gestação. ➢ Para o diagnóstico precoce de gestação é recomendado medir a PSPB no dia 30 pósinseminação e em vacas com mais de 90 dias pós-parto. ➢ Entre os dias 50 e 60 pós-parto todas as vacas não servidas devem ser examinadas via retal para programar seu serviço. REFERÊNCIAS BIBLIOGRÁFICAS AMBROSE, Divakar J. Postpartum anestrus and its management in dairy cattle. Bovine Reproduction, p. 408-430, 2021. BALL, P. J. H.; PETERS, A. R. Reprodução em bovinos. São Paulo: SP, 2006. Características Gerais dos Bovinos/General Characteristics of Cattle Bovine. 2020. Fisiologia da Reprodução Animal: Ovulação, Controle e Sincronização do Cio. 2020. Nutrição Sobre a Reprodução e Fertilidade dos Bovinos. DERIVAUX, Jules; BECKERS, Jean-François; ECTORS, Francis. L'anoestrus du postpartum. Vlaams Diergeneeskundig Tijdschrift, v. 53, p. 215-229, 1984. ELLI, Massimiliano. Manual de reproducción en ganado vacuno. Zaragoza, ES: Servet Edit., 2005. FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA DE LA BARRERA, Luis. Reproducción aplicada en el ganado bovino lechero. 1993. FERREIRA, A. de M. Reprodução da fêmea bovina: fisiologia aplicada e problemas mais comuns (causas e tratamentos). Juiz de Fora: Minas Gerais–Brasil, p. 422, 2010. GARVERICK, H. Allen. Ovarian follicular cysts in dairy cows. Journal of dairy science, v. 80, n. 5, p. 995-1004, 1997. HAFEZ, Elsayed Saad Eldin; HAFEZ, Bahaa. Reprodução animal. 2004. HIDALGO, Galina et al. Reproducción de animales domésticos. 2008. PETER, A. T.; VOS, P. L. A. M.; AMBROSE, D. J. Postpartum anestrus in dairy cattle. Theriogenology, v. 71, n. 9, p. 1333-1342, 2009. PETERS, A. R. et al. Reproducción del ganado vacuno. 1991. SPAIN, JAMES N.; LUCY, MATTHEW C.; HARDIN, DAVID K. Effects of nutrition on reproduction in dairy cattle. In: Current Therapy in Large Animal Theriogenology. WB Saunders, 2007. p. 442-450. UNGERFELD, Rodolfo. Reproducción de los animales domésticos. Edizioni LSWR, 2020. VILLA-GODOY, A. et al. Association between energy balance and luteal function in lactating dairy cows. Journal of Dairy Science, v. 71, n. 4, p. 1063-1072, 1988. WATHES, D. C. et al. Influence of negative energy balance on cyclicity and fertility in the high producing dairy cow. Theriogenology, v. 68, p. S232-S241, 2007. (shrink)

What is the function of morality—what is it all about? What is the basis of morality—what explains our moral agency and patiency? This essay defends a unique Kantian answer to these questions. Morality is about securing our independence from each other by giving each other equal discretion over whether and how we interact. The basis of our moral agency and patiency is practical reason. The first half addresses objections that this account cannot explain the moral patiency of beings who are (...) not also moral agents such as infantile, elderly, and infirm human beings and the other animals who are not moral agents. The second half argues that this account is preferable, on grounds of consistency with the basic Kantian account of the function and content of morality, to the familiar account of our moral patiency, popular especially though not exclusively with contemporary Kantians, in terms of the value of humanity. (shrink)

Cartesian arguments for global skepticism about the external world start from the premise that we cannot know that we are not in a Cartesian scenario such as an evil-demon scenario, and infer that because most of our empirical beliefs are false in such a scenario, these beliefs do not constitute knowledge. Veridicalist responses to global skepticism respond that arguments fail because in Cartesian scenarios, many or most of our empirical beliefs are true. Some veridicalist responses have been motivated using verificationism, (...) externalism, and coherentism. I argue that a more powerful veridicalist response to global skepticism can be motivated by structuralism, on which physical entities are understood as those that play a certain structural role. I develop the structuralist response and address objections. (shrink)

The starting point regarding consent has to be that it is both extremely important, and that it is often suspicious. In this article, the author tries to make sense of both of these claims, from a largely liberal perspective, tying consent, predictably, to the value of autonomy and distinguishing between autonomy as sovereignty and autonomy as nonalienation. The author then discusses adaptive preferences, claiming that they suffer from a rationality flaw but that it's not clear that this flaw matters morally (...) or politically. What matters is whether they suffer from an autonomy flaw. To answer this question, the author develops an account of autonomy failure, according to which a preference is nonautonomous if an injustice played an appropriate role in its causal history. The author then discusses the moral implications—and in an initial way, the political ones as well—of proclaiming a preference, or consent based on it, nonautonomous in this way. (shrink)

This paper develops the Diachronic Self-Making View, the view that we are the non-accidentally best candidate referents of our ‘I’-beliefs. A formulation and defence of DSV is followed by an overview of its treatment of familiar puzzle cases about personal identity. The rest of the paper focuses on a challenge to DSV, the Puzzle of Inconstant ‘I’-beliefs: the view appears to force on us inconsistent verdicts about personal identity in cases that we would naturally describe as changes in one’s de (...) se beliefs. To solve this problem, the paper defends the possibility of overlapping people, and addresses a number of objections to this idea. (shrink)

We propose a formal framework for interpretable machine learning. Combining elements from statistical learning, causal interventionism, and decision theory, we design an idealised explanation game in which players collaborate to find the best explanation for a given algorithmic prediction. Through an iterative procedure of questions and answers, the players establish a three-dimensional Pareto frontier that describes the optimal trade-offs between explanatory accuracy, simplicity, and relevance. Multiple rounds are played at different levels of abstraction, allowing the players to explore overlapping causal (...) patterns of variable granularity and scope. We characterise the conditions under which such a game is almost surely guaranteed to converge on a optimal explanation surface in polynomial time, and highlight obstacles that will tend to prevent the players from advancing beyond certain explanatory thresholds. The game serves a descriptive and a normative function, establishing a conceptual space in which to analyse and compare existing proposals, as well as design new and improved solutions. (shrink)

Two separate research programs have revealed two different factors that feature in our judgments of whether some entity persists. One program—inspired by Knobe—has found that normative considerations affect persistence judgments. For instance, people are more inclined to view a thing as persisting when the changes it undergoes lead to improvements. The other program—inspired by Kelemen—has found that teleological considerations affect persistence judgments. For instance, people are more inclined to view a thing as persisting when it preserves its purpose. Our goal (...) in this paper is to determine what causes persistence judgments. Across four studies, we pit normative considerations against teleological considerations. And using causal modeling procedures, we find a consistent, robust pattern with teleological and not normative considerations directly causing persistence judgments. Our findings put teleology in the driver’s seat, while at the same time shedding further light on our folk notion of an object. (shrink)

Accounts of the nature of unpleasant pain have proliferated over the past decade, but there has been little systematic investigation of which of them can accommodate its badness. This paper is such a study. In its sights are two targets: those who deny the non-instrumental disvalue of pain's unpleasantness; and those who allow it but deny that it can be accommodated by the view—advanced by me and others—that unpleasant pains are interoceptive experiences with evaluative content. Against the former, I argue (...) that pain's unpleasantness does indeed have noninstrumental disvalue; against the latter I argue both that my critics’ own desire-theoretic accounts of pain's unpleasantness cannot accommodate such disvalue, and that my evaluativist view can—either by appealing to “anti-unpleasantness” desires or by exploiting pain's perceptuality. (shrink)

A growing literature is premised on the claim that quantum mechanics provides evidence for metaphysical indeterminacy. But does it? None of the currently fashionable realist interpretations involve fundamental indeterminacy and the ‘standard interpretation’, to the extent that it can be made out, doesn't require indeterminacy either.

This article uses the case study of ethnobiological classification to develop a positive and a negative thesis about the state of natural kind debates. On the one hand, I argue that current accounts of natural kinds can be integrated in a multidimensional framework that advances understanding of classificatory practices in ethnobiology. On the other hand, I argue that such a multidimensional framework does not leave any substantial work for the notion “natural kind” and that attempts to formulate a general account (...) of naturalness have become an obstacle to understanding classificatory practices. (shrink)

Perceptualists say that having a pain in a body part consists in perceiving the part as instantiating some property. I argue that perceptualism makes better sense of the connections between pain location and the experiences undergone by people in pain than three alternative accounts that dispense with perception. Turning to fellow perceptualists, I also reject ways in which David Armstrong and Michael Tye understand and motivate perceptualism, and I propose an alternative interpretation, one that vitiates a pair of objections—due (...) to John Hyman—concerning the meaning of ‘Amy has a pain in her foot’ and the idea of bodily sensitivity. Perceptualism, I conclude, remains our best account of the location of pains. (shrink)

This book introduces readers to the topic of explanation. The insights of Plato, Aristotle, J.S. Mill and Carl Hempel are examined, and are used to argue against the view that explanation is merely a problem for the philosophy of science. Having established its importance for understanding knowledge in general, the book concludes with a bold and original explanation of explanation.

It is conventional wisdom among political philosophers that ideal principles of justice must guide our attempts to design institutions to avert actual injustice. Call this the ideal guidance approach. I argue that this view is misguided— ideal principles of justice are not appropriate "guiding principles" that actual institutions must aim to realize, even if only approximately. Fortunately, the conventional wisdom is also avoidable. In this paper, I develop an alternative approach to institutional design, which I call institutional failure analysis. The (...) basic intuition of this approach is that our moral assessment of institutional proposals is most effective when we proceed from a detailed understanding of the causal processes generating problematic social outcomes. Failure analysis takes the institutional primary design task to be obviating or averting institutional failures. Consequently, failure analysis enables theorists to prescribe more effective solutions to actual injustice because its focuses on understanding the injustice, rather than specifying an ideal of justice. (shrink)

We articulate a holistic understanding of hope, going beyond the common conceptualization of hope in terms of positive affect and cognition by considering what hope means for the underprivileged. In the recognition that hope is always situated in a particular place, we explore the perspective of the privileged and the underprivileged, clarifying how spatial contexts shape their goals for the future and their agency toward attaining these goals. Where some people experience precarity due to their disability, race, gender, sexuality, and (...) social class, others enjoy enhanced agency due to their privilege. In our analysis, this loss of agency does not mean the underprivileged are hopeless; instead, it suggests that hope can incorporate negative affect and cognition. In our view, a spatial understanding acknowledges the power of hope in discouraging situations, and it points to practical measures through which hope can be cultivated by marginalized communities. (shrink)

Justification has long been considered a necessary condition for knowledge, and theories that deny the necessity of justification have been dismissed as nonstarters. In this chapter, we challenge this long-standing view by showing that many of the arguments offered in support of it fall short and by providing empirical evidence that individuals are often willing to attribute knowledge when epistemic justification is lacking.

In the first half of this paper, I argue that essential properties are intrinsic and that this permits a modal analysis of essence that is immune the sort of objections raised by Fine. In the second half, I argue that intrinsic properties collectively have a certain structure and that this accounts for some observations about essences: that things are essentially determinate; that things often have properties within a certain range essentially; and that the essential properties of things are their core (...) properties. (shrink)

The aim of this article is to discuss the relation between indigenous and scientific kinds on the basis of contemporary ethnobiological research. I argue that ethnobiological accounts of taxonomic convergence-divergence patters challenge common philosophical models of the relation between folk concepts and natural kinds. Furthermore, I outline a positive model of taxonomic convergence-divergence patterns that is based on Slater's [2014] notion of “stable property clusters” and Franklin-Hall's [2014] discussion of natural kinds as “categorical bottlenecks.” Finally, I argue that this model (...) is not only helpful for understanding the relation between indigenous and scientific kinds but also makes substantial contributions to contemporary debates about natural kinds.to contemporary debates about natural kinds. (shrink)

To the extent that dualism is even taken to be a serious option in contemporary discussions of personal identity and the philosophy of mind, it is almost exclusively either Cartesian dualism or property dualism that is considered. The more traditional dualism defended by Aristotelians and Thomists, what I call hylemorphic dualism, has only received scattered attention. In this essay I set out the main lines of the hylemorphic dualist position, with particular reference to personal identity. First I argue that overemphasis (...) of the problem of consciousness has had an unhealthy effect on recent debate, claiming instead that we should emphasize the concept of form. Then I bring in the concept of identity by means of the notion of substantial form. I continue by analyzing the relation between form and matter, defending the traditional theses of prime matter and of the unicity of substantial form. I then argue for the immateriality of the substantial form of the human person, viz. the soul, from an account of the human intellect. From this follows the soul's essential independence of matter. Finally, although the soul is the immaterial bearer of personal identity, that identity is still the identity of an essentially embodied being. I explain how these ideas are to be reconciled. Footnotesa I am grateful to Stephen Braude, John Cottingham, John Haldane, David Jehle, Joel Katzav, Eduardo Ortiz, and Fred Sommers for helpful comments and discussion of a draft of this essay. I would also like to thank Ellen Paul, whose suggestions have helped greatly to improve the essay's style and content. (shrink)

Theoreticians that defend a form of realism regarding natural kinds minimally entertain the belief that the world features divisions into kinds and that the natural kind concept is a useful tool for philosophy of science. The objective of this paper is to challenge these assumptions. First, we challenge realism toward natural kinds by showing that the main arguments for their existence, which rely on the epistemic success of natural kinds, are unsatisfactory. Second, we show that, whether they exist or not, (...) natural kinds are expendable when it comes to describing and analyzing scientific explanations accurately. (shrink)

I argue that some important elements of the current cosmological model are 'conventionalist’ in the sense defined by Karl Popper. These elements include dark matter and dark energy; both are auxiliary hypotheses that were invoked in response to observations that falsified the standard model as it existed at the time.

Plato's Phaedo is a literary gem that develops many of his most famous ideas. David Ebrey's careful reinterpretation argues that the many debates about the dialogue cannot be resolved so long as we consider its passages in relative isolation from one another, separated from their intellectual background. His book shows how Plato responds to his literary, religious, scientific, and philosophical context, and argues that we can only understand the dialogue's central ideas and arguments in light of its overall structure. (...) This approach yields new interpretations of the dialogue's key ideas, including the nature and existence of 'Platonic' forms, the existence of the soul after death, the method of hypothesis, and the contemplative ethical ideal. Moreover, this comprehensive approach shows how the characters play an integral role in the Phaedo's development and how its literary structure complements Socrates' views while making its own distinctive contribution to the dialogue's drama and ideas. (shrink)

The paper considers contemporary models of presumption in terms of their ability to contribute to a working theory of presumption for argumentation. Beginning with the Whatelian model, we consider its contemporary developments and alternatives, as proposed by Sidgwick, Kauffeld, Cronkhite, Rescher, Walton, Freeman, Ullmann-Margalit, and Hansen. Based on these accounts, we present a picture of presumptions characterized by their nature, function, foundation and force. On our account, presumption is a modal status that is attached to a claim and has the (...) effect of shifting, in a dialogue, a burden of proof set at a local level. Presumptions can be analysed and evaluated inferentially as components of rule-based structures. Presumptions are defeasible, and the force of a presumption is a function of its normative foundation. This picture seeks to provide a framework to guide the development of specific theories of presumption. (shrink)

Bounded rationality gets a bad rap in epistemology. It is argued that theories of bounded rationality are overly context‐sensitive; conventionalist; or dependent on ordinary language (Carr, 2022; Pasnau, 2013). In this paper, I have three aims. The first is to set out and motivate an approach to bounded rationality in epistemology inspired by traditional theories of bounded rationality in cognitive science. My second aim is to show how this approach can answer recent challenges raised for theories of bounded rationality. My (...) third aim is to clarify the role of rational ideals in bounded rationality. (shrink)

This is a story about three of my favorite philosophers—Donnellan, Russell, and Frege—about how Donnellan’s concept of having in mind relates to ideas of the others, and especially about an aspect of Donnellan’s concept that has been insufficiently discussed: how this epistemic state can be transmitted from one person to another.

Many philosophers have claimed that the folk endorse moral universalism. Some have taken the folk view to support moral universalism; others have taken the folk view to reflect a deep confusion. And while some empirical evidence supports the claim that the folk endorse moral universalism, this work has uncovered intra-domain differences in folk judgments of moral universalism. In light of all this, our question is: why do the folk endorse moral universalism? Our hypothesis is that folk judgments of moral universalism (...) are generated in part by a desire to punish. We present evidence supporting this across three studies. On the basis of this, we argue for a debunking explanation of folk judgments of moral universalism. Our results not only further our understanding of the psychological processes underpinning folk judgments of moral universalism. They also bear on philosophical discussions of folk meta-ethics. (shrink)

Is behavioral integration (i.e., which occurs when a subjects assertion that p matches her non-verbal behavior) a necessary feature of belief in folk psychology? Our data from nearly 6,000 people across twenty-six samples, spanning twenty-two countries suggests that it is not. Given the surprising cross-cultural robustness of our findings, we suggest that the types of evidence for the ascription of a belief are, at least in some circumstances, lexicographically ordered: assertions are first taken into account, and when an agent sincerely (...) asserts that p, non-linguistic behavioral evidence is disregarded. In light of this, we take ourselves to have discovered a universal principle governing the ascription of beliefs in folk psychology. (shrink)

Many people believe that for someone to now be responsible for some past action, the agent of that action and the responsible agent now must be one and the same person. In other words, many people that moral responsibility presupposes numerical personal identity. In this paper, I show why this platitude is false. I then suggest an account of what actual metaphysical relationship moral responsibility presupposes instead.

Classical logic is usually interpreted as the logic of propositions. But from Boole's original development up to modern categorical logic, there has always been the alternative interpretation of classical logic as the logic of subsets of any given (nonempty) universe set. Partitions on a universe set are dual to subsets of a universe set in the sense of the reverse-the-arrows category-theoretic duality--which is reflected in the duality between quotient objects and subobjects throughout algebra. Hence the idea arises of a dual (...) logic of partitions. That dual logic is described here. Partition logic is at the same mathematical level as subset logic since models for both are constructed from (partitions on or subsets of) arbitrary unstructured sets with no ordering relations, compatibility or accessibility relations, or topologies on the sets. Just as Boole developed logical finite probability theory as a quantitative treatment of subset logic, applying the analogous mathematical steps to partition logic yields a logical notion of entropy so that information theory can be refounded on partition logic. But the biggest application is that when partition logic and the accompanying logical information theory are "lifted" to complex vector spaces, then the mathematical framework of quantum mechanics is obtained. Partition logic models indefiniteness (i.e., numerical attributes on a set become more definite as the inverse-image partition becomes more refined) while subset logic models the definiteness of classical physics (an entity either definitely has a property or definitely does not). Hence partition logic provides the backstory so the old idea of "objective indefiniteness" in QM can be fleshed out to a full interpretation of quantum mechanics. (shrink)

Orthodoxy has it that knowledge is a composite of belief and non-mental factors. However, Timothy Williamson suggests that orthodoxy implies that the concept of belief is acquired before the concept of knowledge, whereas developmental data suggest the reverse. More recently, Jennifer Nagel reviews the psychological evidence, building a psychological case that the concept of knowledge emerges prior to belief. I assess the psychological state of the art and find support for the opposite conclusion. Overall the empirical evidence supports the orthodox (...) view that the concept of belief is prior to the concept of knowledge. (shrink)

This paper presents a uniform general account of regress problems in the form of a pentalemma—i.e., a set of five mutually inconsistent claims. Specific regress problems can be analyzed as instances of such a general schema, and this Regress Pentalemma Schema can be employed to generate deductively valid arguments from the truth of a subset of four claims to the falsity of the fifth. Thus, a uniform account of the nature of regress problems allows for an improved understanding of specific (...) regress objections or arguments, and, correspondingly, of the general logical geography of the debate about infinite regresses. This uniform approach is illustrated by a treatment of the classical epistemological problem of justification, but it encompasses a whole variety of cases including explanation and ontological grounding. Furthermore, this general account is compared and contrasted with the existing literature discussing argument schemata for regress objections, particularly with the work of Jan Willem Wieland. It is shown how such other schemata can be incorporated and superseded by the general Regress Pentalemma Schema. (shrink)

In this paper I consider whether a powers ontology facilitates a reduction of causal relations to intrinsic powers of the causal relata. I first argue that there is a tension in the view that powerful causation is an internal relation in this sense. Powers are ontologically dependent on other powers for their individuation, but in that case—given an Aristotelian conception of properties as immanent universals—powers will not be intrinsic on several extant analyses of ‘intrinsic’, since to possess a given power (...) P requires the existence of other concrete particulars as bearers of the powers that individuate P. I suggest several ways for Aristotelians to resolve this tension, but all tenable options involve individuative type-level causal relations between powers. While these individuative relations between powers are internal in the sense that the powers are essentially related, this is a different sense of ‘ internal ’ to the one that entails reducibility. The proposed reduction of token-causal relations to powers succeeds only at the cost of irreducible type-level causal relations between the powers themselves. (shrink)

In this paper, I explore anomalous dualism about consciousness, a view that has not previously been explored in any detail. We can classify theories of consciousness along two dimensions: first, a theory might be physicalist or dualist; second, a theory might endorse any of the three following views regarding causal relations between phenomenal properties (properties that characterize states of our consciousness) and physical properties: nomism (the two kinds of property interact through deterministic laws), acausalism (they do not causally interact), and (...) anomalism (they interact but not through deterministic laws). I suggest that a kind of anomalous dualism, nonreductive anomalous panpsychism, promises to offer the best overall answer to two pressing issues for dualist views, the problem of mental causation and the mapping problem (the problem of predicting mind-body associations). (shrink)

If there is content that we reason on, cognitive content, it is in the head and accessible to reasoning mechanisms. This paper discusses the phenomenal theory of cognitive content, according to which cognitive contents are the contents of phenomenal consciousness. I begin by distinguishing cognitive content from the closely associated notion of narrow content. I then argue, drawing on prior work, that the phenomenal theory can plausibly account for the cognitive contents of many relatively simple mental states. My main focus (...) in this paper is the question whether the phenomenal theory can account for the apparently abstract and complex cognitive contents of "high-level" thoughts. It might seem dubious that the theory can account for such cognitive contents, because cognitive phenomenology is too scarce and too thin. However, I argue there are in fact few abstract or complex cognitive contents, so the phenomenal theory's predictions are correct. This position explains some apparently irrational behavior that is otherwise hard to explain, and it makes sense of the central role of inner speech and other forms of consciousness in reasoning. (shrink)

This paper argues that the problematic of rule following in Wittgenstein's Philosophical Investigations and Heidegger's analysis of anxiety in Being and Time have analogous structures. Working through these analogies helps our interpretation of both of these authors. Contrasting sceptical and anti-sceptical readings of Wittgenstein helps us to resolve an interpretive puzzle about what an authentic response to anxiety looks like for Heidegger. And considering the importance of anxiety to Heidegger's conception of authenticity allows us to locate in Wittgenstein's later philosophy (...) a covert appeal to something resembling Heideggerian authenticity. (shrink)

We describe a strategy for integration of data that is based on the idea of semantic enhancement. The strategy promises a number of benefits: it can be applied incrementally; it creates minimal barriers to the incorporation of new data into the semantically enhanced system; it preserves the existing data (including any existing data-semantics) in their original form (thus all provenance information is retained, and no heavy preprocessing is required); and it embraces the full spectrum of data sources, types, models, and (...) modalities (including text, images, audio, and signals). The result of applying this strategy to a given body of data is an evolving Dataspace that allows the application of a variety of integration and analytic processes to diverse data contents. We conceive semantic enhancement (SE) as a lightweight and flexible process that leverages the richness of the structured contents of the Dataspace without adding storage and processing burdens to what, in the intelligence domain, will be an already storage- and processing-heavy starting point. SE works not by changing the data to which it is applied, but rather by adding an extra semantic layer to this data. We sketch how the semantic enhancement approach can be applied consistently and in cumulative fashion to new data and data-models that enter the Dataspace. (shrink)

Working within the broad lines of general consensus that mark out the core features of John Stuart Mill’s (1806–1873) logic, as set forth in his A System of Logic (1843–1872), this chapter provides an introduction to Mill’s logical theory by reviewing his position on the relationship between induction and deduction, and the role of general premises and principles in reasoning. Locating induction, understood as a kind of analogical reasoning from particulars to particulars, as the basic form of inference that is (...) both free-standing and the sole load-bearing structure in Mill’s logic, the foundations of Mill’s logical system are briefly inspected. Several naturalistic features are identified, including its subject matter, human reasoning, its empiricism, which requires that only particular, experiential claims can function as basic reasons, and its ultimate foundations in ‘spontaneous’ inference. The chapter concludes by comparing Mill’s naturalized logic to Russell’s (1907) regressive method for identifying the premises of mathematics. (shrink)

The notion of an agent and the notion of a self are connected, for agency is one role played by the self. Millgram argues for a disunity thesis of agency on the basis of extreme incommensurability across some major life events. We propose a similar negative thesis about the self, that it is composed of relatively independent threads reflecting the different roles and different mind-sets of the person's life. Our understanding of those threads is based on theories of the narrative (...) construction of the self. Our disunity thesis is that there need be no overarching narrative that unifies those narrative threads. To explain how the threads hang together to produce coherent action, we make these positive claims: control normally switches smoothly and unconsciously between threads as circumstances require, within one thread there is likely to be acknowledgment of other threads, some situations require a temporary blending of threads, and some plans and policies reach across different threads and contribute to some coordination among them. Our account of a self provides an account of agency that has merits in comparison to Millgram's. Our narrative approach allows explanations of actions beyond rational deliberation. (shrink)

Agents' Abilities ist ein Geschenk von einem Buch, das man nicht genug loben kann. Und deswegen versuche ich es erst gar nicht. Stattdessen beschränke ich mich auf einige konstruktiv-kritische Bemerkungen, die in zwei miteinander verbundenen Bereichen Perspektiven der Weiterentwicklung und Verfeinerung aufzeigen sollen.

There is much philosophical literature on the duty to rescue. Individuals who encounter and could save, at relatively little cost to themselves, a person at risk of losing life or limb are morally obligated to do so. Yet little has been said about the other side of the issue. There are cases in which the need for rescue could have been reasonably avoided by the rescuee. We argue for a duty to take rescue precautions, providing an account of the circumstances (...) in which it arises. This novel duty has important implications for public policy. We apply it to the situation of some of the uninsured in the United States. Given the US clinician's duty to provide emergency care to all people regardless of ability to pay, some of the uninsured have a moral duty to purchase health insurance. We defend the duty against objections, including the possibility that a right to rescue can be waived, thus undermining a duty to take rescue precautions, that the duty of many professionals is voluntarily incurred, and that a distinction between actively assumed and passively assumed risks matters morally. (shrink)

While the nature of the virtues and their role in human action are controversial, we wish to explore the thesis that virtues play a causal role in the production of action. One fruitful, though controversial, approach to understanding the nature of the self is through the notion of a narrative and in particular a person’s self narrative or narratives. Similarly we wish to explore the thesis that self narratives play a causal role in action. We consider how virtues and self-narratives (...) interrelate and, in particular, how they play a comparable role in the production of action. The basic ideas in the literature concerning reasons as causes of action provide us with a useful starting point even though the focus on reasons has tended to sideline potential causal roles for both virtues and self-narratives. Without attempting to develop a new theory of causation, we draw a picture of how virtues and self-narratives, in relation to each other, can be regarded as causally effective in producing action. (shrink)

We provide conditions under which an incomplete strongly independent preorder on a convex set X can be represented by a set of mixture preserving real-valued functions. We allow X to be infi nite dimensional. The main continuity condition we focus on is mixture continuity. This is sufficient for such a representation provided X has countable dimension or satisfi es a condition that we call Polarization.