En 1960 ingresaba José María Haro Salvador en la Real Academia Valenciana de Jurisprudencia y Legislación con un discurso titulado «Relaciones y fronteras entre la Caridad y la Justicia». Tomaba cuerpo ahí la experiencia dilatada de un jurista cuya pasión por lo social le había conducido de forma absolutamente natural desde su juventud hacia los problemas jurídicos relacionados con el mundo del trabajo y la promoción social de los obreros. Era en una época, además, marcada por un importante proceso (...) de institucionalización de organismos públicos, procedimientos y discursos sin referencia a los cuales no se entendería en muy buena medida la España del presente. En este proceso tuvo también José María Haro un papel decisivo, tanto por su labor en la magistratura del trabajo, de la que fue primer titular en la Valencia de la postguerra, como en el Instituto Nacional de Previsión (I. N. P.), cuya delegación provincial comenzó a presidir en 1950. Ahí encontró un canal extraordinario para la proyección de sus ideales sociales, germinados en el suelo del magisterio pontificio y de la tradición del catolicismo social que tan importante impulso recibió en Valencia entre los siglos XIX y XX, gracias a las figuras insignes del P. Antonio Vicent, Antonio y Rafael Rodríguez de Cepeda, Juan Reig Genovés y muchos otros. De todos ellos se declara en débito José María Haro a lo largo de las páginas que componen este libro, muchas de ellas publicadas hoy por primera vez, más de medio siglo después de su redacción. Sin duda el paso del tiempo se hará notar en muchas de estas ideas, que necesariamente deben ser leídas en su contexto. En estos últimos cincuenta años han sido enormes los cambios producidos en el terreno de las ideas tanto como en el de las instituciones. Las leyes se suceden, las obras se transforman, algunas incluso mueren, pero los principios permanecen, porque no tienen su fuente en las circunstancias, necesariamente variables, de nuestra condición histórica, ni en las orientaciones particulares de una determinada política o de un régimen. Al contrario, beben del Evangelio y del derecho natural, de cuya síntesis y vitalidad es todo este libro un penetrante y constante reclamo. (shrink)

The use of artificial intelligence in philosophy opens new avenues for inquiry, particularly through dialogical methods inspired by the Socratic tradition. This paper exemplifies the engagement with ChatGPT-4o by OpenAI as a philosophical interlocutor, highlighting how this format facilitates a clear distinction between the philosopher's contributions and those generated by the AI. By allowing the philosopher to lead the dialogue, this technique liberates him from the constraints of drafting and formal writing, enabling a more spontaneous exploration of ideas. The conversation (...) begins with a foundational definition of intelligence and progresses toward a deeper and philosophically relevant understanding. This exchange not only showcases the potential of AI to enrich philosophical discourse but also emphasizes the significance of critical questioning in examining complex concepts such as intelligence and the implications of artificial cognition. (shrink)

Reseña introductoria para una interpretación teológica de la obra literaria de C.S. Lewis.

The historical avant-gardes showed that it is in the syntactic space where the mutations of art occur, where the creative potentialities in contemporary art are played. Hence the need to accentuate the syntactic creation registers in the works of the Estridentistas. There is no creation of images, rhythms, words, atmospheres, sound orientations, planes or political-literary postures that are valid apart from the syntax effects in which the poems of Manuel Maples Arce, Germán List, Salvador Gallardo and Kyn-Taniya take place, (...) the paintings, engravings and sculptures by Fermín Revueltas, Ramón Alva de la Canal, Germán Cueto and Leopoldo Méndez, the novels and essays by Arqueles Vela, the pieces from the Estridentista period by Silvestre Revueltas, the plays by Salvador Gallardo and Germán Cueto. The syntax is the tracing of indirect paths created in each poem, installation, plastic or musical work, to show life in things; those forces, paths and paths that, when going from life to language, create a work. It is, therefore, a speed. I don't use "speed" as a metaphor. It is the speeds that interdigitate events, images, objects; those that relate and stress semantic, sound, semiotic and social forces, paths and trajectories. Velocity is the gradient of the syntax, the relationship between phenomena, the variation of the elements according to a certain direction, the trajectory medium, the semantic loads and the systems of signs: it is not necessary to think that the syntactic effects are something like general mechanisms that precede poems, plastic and musical works. A new syntactic speed detaches itself as much as it can from what is constituted and seeks to bring poetic, pictorial, musical language to its threshold of meaning, informational or communication, to its referential, rhythmic, constructive threshold. Therefore, it should not be confused with acceleration. Slowness is a speed, as in Handke's writing or in some sections of Tarr's films. (shrink)

We introduce an expected-value theory of linguistic modality that makes reference to expected utility and a likelihood-based confirmation measure for deontics and epistemics, respectively. The account is a probabilistic semantics for deontics and epistemics, yet it proposes that deontics and epistemics share a common core modal semantics, as in traditional possible-worlds analysis of modality. We argue that this account is not only theoretically advantageous, but also has far-reaching empirical consequences. In particular, we predict modal versions of reasoning fallacies from the (...) heuristics and biases literature. Additionally, we derive the modal semantics in an entirely transparent manner, as it is based on the compositional semantics of Korean modal expressions that are morphosyntactically decomposed into a conditional and an evaluative predicate. (shrink)

Analizando las características de las facultades humanas y sus objetos, se proponen algunas distinciones que llevan a una definición coherente del arte y se expone un desarrollo de las consecuencias de dicha definición. Durante este proceso se examinan los aspectos que el arte y otras actividades humanas, como el deporte, poseen en común, y se señalan los criterios fundamentales que dividen lo que es y lo que no es arte. Esto permite articular una crítica a algunas formas de arte contemporáneo, (...) como el arte conceptual y el arte encontrado --art trouvé, readymade--, así como presentar una clasificación filosófica de los valores que toda obra de arte debería satisfacer. (shrink)

Se presenta una teoría axiomática sobre entidades compuestas generales. Por entidad compuesta se hace referencia a cualquier ser hecho de partes. Usando esta formalización, es posible llegar a algunas conclusiones metafísicas valiosas, como la no equivalencia entre los conceptos de entidad compuesta y conjunto matemático. Asimismo, se analizan y desacreditan algunas formas de platonismo matemático. Se proponen algunos ejercicios para ayudar al lector a aprender la notación simbólica.

Se presenta una introducción general a la semiótica y se proponen y desarrollan las nociones de semiosis activa y pasiva, remota y próxima, así como las clasificaciones de los accidentes del signo, de los tipos de mensajes, y los conceptos de identificador y de expansión de arreglos, con sus respectivas divisiones. El texto está escrito con la intención de establecer los principios fundamentales del pensamiento del autor con relación a la teoría filosófica del signo. -/- A general introduction to semiotics (...) is presented and the notions of active and passive, remote and proximate semiosis are proposed and developed, as well as the classifications of sign accidents, types of messages, and the concepts of identifier and expansion of arrays, with their respective divisions. The text is written with the intention of establishing the fundamental principles of the author's thought in relation to the philosophical theory of the sign. (shrink)

An essay that seeks to show how modern thinking could never create an affirmative concept of difference. The dispute between Buffon, De Pauw, from the European shore, and Clavijero, from the American one, shows how the Natural History device was built.

An essay on the operation of the powers of control during the pandemic lockdown. Thus, the meaning of contemporary noise, the anthropause, the connection as a norm, the appearance of a new chain between biopolitical regulations, norms and subjective modulations are analyzed. The untimely force of the event is proposed as a way of resisting control. -/- Un ensayo sobre el funcionamiento de los poderes de control durante el encierro pandémico. Se analizan, así, el sentido del ruido contemporáneo, la antropausa, (...) la conexión como norma, la aparición de un nuevo encadenamiento entre regulaciones biopolíticas, normas y modulaciones subjetivas. Se propone la fuerza intempestiva del acontecimiento como forma de resistir al control. (shrink)

Philosophy, it is said, has always been concerned with space and nature. Since Aristotle, even since the pre-Socratics, and up to Descartes and Leibniz at least, no one was worthy of the title of philosopher if he had not written something about meteors. And not only about meteors: observations on the movements of the Earth and changes in nature, changes of state or speed, transitions and contacts between strange elements, spatial geometrical properties, the order of coexistences - their limits - (...) and the correspondences between scales; force and matter, constructive typologies and geomorphology were an indissoluble part of the philosophical field. It is not that philosophy reflected on these external themes, but that these themes formed the fabric of the philosophical body. What happened, then, between the end of the seventeenth century and the first half of the eighteenth century? How did the themes related to space and nature become diluted and disappear from philosophical discourses? It is not a question of the split between man and nature, ancient and incommensurable, but of the separation of nature itself, modern and discontinuous, by means of which it was placed alongside the barren, the inert, as a category. -/- La filosofía, se dice, se ocupó siempre de los espacios y de la naturaleza. Desde Aristóteles, incluso desde los presocráticos, y hasta Descartes y Leibniz por lo menos, nadie era digno del título de filósofo si no había escrito algo sobre los meteoros. Y no sólo sobre los meteoros: las observaciones sobre los movimientos de la Tierra y la mudanza en la naturaleza, los cambios de estado o de velocidad, las transiciones y los contactos entre elementos extraños, las propiedades geométricas espaciales, el orden de las coexistencias —sus límites— y las correspondencias entre las escalas; la fuerza y la materia, las tipologías constructivas y la geomorfología formaban parte indisoluble del campo filosófico. No es que la filosofía reflexionase sobre esos temas externos, sino que esos temas formaban el tejido del cuerpo filosófico. ¿Qué sucedió, entonces, entre el final del siglo XVII y la primera mitad del siglo XVIII? ¿Cómo fue que los temas relacionados con el espacio y la naturaleza se diluyeron y desaparecieron de los discursos filosóficos? No se trata de la escisión entre hombre y naturaleza, antigua e inconmensurable, sino de la separación de sí de la naturaleza misma, moderna y discontinua, por medio de la cual fue puesta al lado de lo yerto, lo inerte, como una categoría. (shrink)

Lezama, and later Deleuze, discovered that the baroque does not refer to an essence, but to an operative function. That operative function is the fold, which "curls and multiplies", as Lezama writes, and proliferates to infinity. We all know the examples with which Lezama placed his concept of the American baroque: the poems of Domínguez Camargo, those of Sor Juana, the architectures of the Kondori Indian, the baptismal fonts of Aleijadinho, "ornamented like accordions, with spiraloid leaves that ascend"; the chapel (...) of the Rosary, in Puebla, omamentada "without truce or free spatial parenthesis". This is how the fold operates, it is like a leprosy or a lichen -in the past, certain lichens were called leprosy-: it infests by enveloping and developing, it proliferates by setting in motion the fold-unfold pair. Lezama does not seek to reconfigure the sequences of history, but to superimpose other cycles on them, create gaps and vanishing points in chronological and causal narratives, divert the emphasis placed on cultures and redirect it to imaginary eras, until the meaning comes from a series of scales established in the historical. The eras would be ordered according to their potentiality to create images; thus it would be possible to establish the points where the image was imposed as history. The Carolingian imaginary era, for example, forged a link between the prodigies, the marvelous islands, the battles against the Saracens and theocratic reason. How are these scales established and how do they operate? How do counterpoint, images and links work? (shrink)

This paper elaborates a neo-Wittgensteinian, philosophical-anthropological alternative to classically Aristotelian approaches in the philosophy of friendship. On the classic approach, the value of friendship, as a practice, and the value of particular friendships within the life of any given individual, are each subordinated to the ur-value of individual flourishing. That is, it starts with a value that it sees as frustrated or fulfilled by social practice. The alternative, meanwhile, moves from the articulation of social practice to the values these practices (...) frame. I will argue that the alternative is descriptively and prescriptively superior when what’s at issue is the status of a social practice like friendship. By acknowledging the co-constitution of self, practice, and other, the alternative gives one the latitude to recognize and philosophize about relationships that tend to fall out of contemporary accounts of love and friendship as these are actually lived; produces descriptions and questions that are truer to lived experiences of friendship; and respects one of the most basic norms of friendship—that is, a friend’s irreducible particularity to oneself—without having to provide a self-defeatingly instrumentalist or reductionist argument for it. (shrink)

Mental health among students is one of the major concerns amidst the pandemic. Employing a correlational design, this study investigates the relationship between emotional intelligence and mental health among 152 senior high school students. Based on the statistical analysis, the r coefficient of 0.82 indicates a high positive correlation between the variables. The p-value of 0.00, which is less than 0.05, leads to the decision to reject the null hypothesis. Hence, a significant relationship exists between emotional intelligence and mental health (...) among senior high school. Implications were discussed in the study. (shrink)

We propose a way to explain the diversification of branches of mathematics, distinguishing the different approaches by which mathematical objects can be studied. In our philosophy of mathematics, there is a base object, which is the abstract multiplicity that comes from our empirical experience. However, due to our human condition, the analysis of such multiplicity is covered by other empirical cognitive attitudes (approaches), diversifying the ways in which it can be conceived, and consequently giving rise to different mathematical disciplines. This (...) diversity of approaches is founded on the manifold categories that we find in physical reality. We also propose, grounded on this idea, the use of Aristotelian categories as a first model for this division, generating from it a classification of mathematical branches. Finally we make a history review to show that there is consistency between our classification, and the historical appearance of the different branches of mathematics. (shrink)

The year 2021 marked the commemoration of the centenary of the appearance of the stridentist movement and the literary avant-garde in Mexico. Stridentism broke into the public con- sciousness with the publication of the leaflet Actual No 1 on the main thoroughfares of Mexico City, convulsing the cultural en- vironment of the early 1920s and bringing together diverse young artists to undertake a literary renewal. This facsimile edition of Actual No 3, the final issue of Manuel Maples Arce’s magazine, which (...) appeared a hundred years ago this year and which until very recently was practically unknown, seeks to bring to the pub- lic something that is at once a singular avant-garde object and a magazine that expressed, at a very early stage, the cosmopolitan, iconoclastic, youthful character of stridentism and its time. "Stridentist Neo-object Actual No 3" is a essay that shows that from foundationless things and objects without gravitation to recomposed neo-objects emerges one of the lengthiest, rup- tured, polyhedric mutations in all fields of knowledge. The historical avant-gardes worked precisely in the turning of the tide on auratic objects that led to the appearance of neo-objects or recomposed objects. In their approach to objects, they tried var- ious operations: they deepened the depresentification of “natural” or “given” things, seeking—in some cases—dematerialization, the simultaneity of planes, the breakdown of logical links, while in others they the sought the primacy of the concept. They created multidimensional neo-objects shot through with events, on the scales of spaces, from the juxtaposed to the dislocated, the simultaneous contiguous to the dispersed, and the close to the distant. They criticized objects and materials they saw as bourgeois, auratic, and linked to ancient traditions and techniques. They created new syntactic velocities through which they interdigitated technical objects newly fashioned by human sensibility. (shrink)

Explanation of how the universe originated from nothing in the form of movement, how everything dynamically expands without end and in a synchronized manner, what is gravity, what is time and what is the universe.

La construcción de un pensamiento y de una inteligencia artificial es posible con el lenguaje de las letras numeradas. Lenguaje que surgió a través de la creación del libro “Nueva matemáticas de letras, triunfa con la matemática” actualizado con el título “Nueva matemáticas de letras 2ª edición”. Libros en los que se exponen el lenguaje de las letras y una matemática de letras donde se encuentran las sumas, restas, multiplicaciones y divisiones de letras, con ejemplos y con sus correspondientes tablas (...) matemáticas. Con la matemática de las letras se podrán hacer cualquier tipo de operaciones matemáticas, puesto que es una matemática más. Con el lenguaje de las letras numeradas en orden, que representan letras, palabras y oraciones numeradas en orden, un robot con inteligencia artificial a través de los números de las palabras numeradas en orden podría adquirir un sin fin de todo tipo de información obtenida por cualquier sentido artificial. Informaciones numéricas que se tendrían que transformar en números binarios. (shrink)

In this article I briefly explain what souls are. Which are in everything that exists; They are possessed by people, animals, plants, non-living matter and any type of energetic existence. But only those that have evolved into living matter can be living souls; Furthermore, these must belong to an order such as the living evolutionary order. At the same time that everything evolves, the souls of everything also evolve, because everything is mathematically hierarchical through the evolutions of all the souls. (...) The cosmos is a saturation of dynamically synchronized evolutionary souls. Souls are the smallest possible immaterial existences that exist, which have the ability to memorize an infinite amount of information, since information does not take up space. The more information the souls have memorized, the greater the chances they have of evolving further. (shrink)

Nuevos descubrimientos sobre el tiempo que pueden cambiar las ideas que se tienen sobre el universo. El tiempo es el transcurrir dinámico de algo, siempre que ese transcurrir dinámico esté sincronizado. Ya que cómo va a envejecer algo sin una transformación sincronizada. En el universo todo transcurre como tiempo porque todo está inducido a transformarse dinámicamente de una manera sincronizada por el movimiento sincronizado inducido por la expansión universal. Está incompleto el famoso razonamiento de Einstein sobre los gemelos y el (...) viaje espacial, ya que no solamente envejecerá menos el gemelo que viaje en la nave espacial a gran velocidad, sino que aún envejecerá mucho menos cuanto mayor peso y tamaño tenga la nave espacial. Como el tiempo es el transcurrir dinámico sincronizado inducido por la expansión universal a todo lo que existe, si a esta inducción se le ponen impedimentos como es viajar a grandes velocidades o viajar con grandes pesos y tamaños, estos impedimentos reducirán esa inducción sincronizada expansiva inducida por la expansión universal, produciendo menos transformaciones dinámicas o envejecimientos en el gemelo, en la propia nave espacial y en todo lo que se encuentre en ella. (shrink)

Con el método de las letras numeradas se podrá construir un robot con inteligencia artificial que pueda tener infinitos conocimientos. Pero no podrá tener libre albedrío, ya que éste solo se puede tener si se posee vida. Como las máquinas con inteligencia artificial no pueden poseer vida nunca podrán por su propia cuenta ser un peligro para la humanidad, solo podrán actuar según lo programado por los programadores. La vida nos obliga a vivir, a tener necesidades vivientes que nos hacen (...) poder actuar por nuestra propia cuenta, por eso tenemos libre albedrío. Gracias a que necesitamos vivir, tanto para lo bueno como para lo malo, podemos amar, odiar, desear, ambicionar, etc., y por eso podemos poseer libre albedrío. El lenguaje de las letras numeradas será el medio que se utilizará para que las máquinas puedan pensar y adquirir información sin fin, informaciones que la podrán adquirir por medio de los sentidos artificiales y de los programas que se les instalen. Las informaciones que obtenemos con nuestros sentidos se obtienen de manera cuántica binaria, aunque cada sentido tenga su propio lenguaje. Estas informaciones cuánticas binarias se llevarán al pensamiento a velocidades cuánticas, el cual se encargará de buscar los significados de las informaciones, como si buscara en un diccionario cuántico, para así poder saber en forma de números binarios qué significa cada información obtenida. Eso es pensar. (shrink)

Is it possible ontologically to think about education? Can the ontological category of “being” allow us to think of an educational human being? How can the ontological category of “being there” contextualize the educational reality in Latin America? These questions will guide an ontological reflection based on Latin-American philosophical categories “being” and “being there” for thinking about education. This reflection will propose an ontological presence of the symbol from the analogy and the educational experience, as a reality that opens to (...) new experiences in teaching and learning. (shrink)

The conjunction fallacy is the well-documented empirical finding that subjects sometimes rate a conjunction A&B as more probable than one of its conjuncts, A. Most explanations appeal in some way to the fact that B has a high probability. But Tentori et al. (2013) have recently challenged such approaches, reporting experiments which find that (1) when B is confirmed by relevant evidence despite having low probability, the fallacy is common, and (2) when B has a high probability but has not (...) been confirmed by relevant evidence, the fallacy is less common. They conclude that degree of confirmation, rather than probability, is the central determinant of the conjunction fallacy. In this paper, we address a confound in these experiments: Tentori et al. (2013) failed to control for the fact that their (1)-situations make B conversationally relevant, while their (2)-situations do not. Hence their results are consistent with the hypothesis that con- versationally relevant high probability is an important driver of the conjunction fallacy. Inspired by recent theoretical work that appeals to conversational relevance to explain the conjunction fallacy, we report on two experiments that control for this issue by making B relevant without changing its degree of probability or confirmation. We find that doing so increases the rate of the fallacy in (2)-situations, and leads to comparable fallacy-rates as (1)-situations. This suggests that (non-probabilistic) conversational relevance indeed plays a role in the conjunction fallacy, and paves the way toward further work on the interplay between relevance and confirmation. (shrink)

ABSTRACT This essay deals with the relation between representation, imitation, and the affects in Don Quixote. In so doing, it focuses on Cervantes’s Platonist poetics and his own views of imitation and the books of knighthood. Although most readers, translators, and critics have until now deemed Cervantes’s use of the word “republic” in Don Quixote unimportant, the word “república” or republic is in fact the entry point to Cervantes’ Platonist critique of the novels of knighthood, and his (...) notions of writing, imitation, and the emotions. (shrink)

The Scottish economist Adam Smith recommends specialization, but Salvador Dali was not very specialized: he painted, wrote books, acted, sang, and made films. In this paper, I draw attention to a tactical advantage of not specializing for Dali, when faced with various challenges.

Artykuł stanowi próbę artystycznej i estetycznej analizy dzieła Chrystus św. Jana od Krzyża Salvadora Dalego jako obrazu realizującego główne postulaty estetyki postmodernizmu. Zastosowana perspektywa badawcza ma na celu wyjście poza tradycyjną zależność polegającą na wskazywaniu tego, co postmodernizm przejął od wcześniejszych nurtów awangardowych, w szczególności od surrealizmu. Proponowana odwrócona perspektywa odsyła do innej, wzbogacającej relacji: wskazuje bezpośrednio na to, co surrealizm odkrył i w artystyczny sposób wykorzystał na długo przed nastaniem estetyki postmodernizmu.

School administrators are mandated to take the instructional leadership roles. On this premise, a study assessed the extent of instructional leadership practices of public elementary school administrators in El Salvador City Division, Philippines. Also, it explored their actual practices, challenges encountered, and the ways they overcome the challenges in practicing instructional leadership. It employed a mixed-method research design. It administered the adopted assessment tool on instructional leadership to 15 school administrators and 12 of them were involved in the individual (...) interviews. This was conducted between the last quarter of 2019 and the first quarter of 2020. Descriptive statistics were used to describe the extent of instructional leadership practices. Also, it analyzed the actual practices, the challenges encountered, and the ways of overcoming these challenges using thematic narrative analysis. Results revealed that public school administrators have always practiced the four domains or strands of instructional leadership to a very high extent. Providing the technical assistance, conducting clinical supervision, and innovating teaching and learning emerged as themes of their actual practices. These administrators had encountered challenges in dealing with teachers’ attitudes, conflicting schedules and activities, and teachers’ resistance to changes. They overcome the challenges by trying to meet the competency standards, adapting and modifying the existing programs, contextualizing teaching and learning, and inculcating the value and benefits of class observation. Looking at the findings from the lens of deliberate practice theory, it was concluded that school administrators have indicated they have acquired knowledge and a high level of understanding of their instructional leadership roles. But despite of this, they still met challenges and have tried their best to manage them. This study presented some doable and practical recommendations to the Department of Education (DepEd) and concerned offices which may benefit both the internal and external stakeholders of the schools. (shrink)

Are the leading members of different fields comparable in their achievements? Is the A-grade painter (or A* if that is your top grade) somehow equivalent to the A-grade boxer, say? I would like to think so, but there is a problematic piece of data for me, though there is a philosophical question of why it is problematic: I find some brief remarks from a certain painter as funny as the jokes of leading comedians. In the appendix, I cast doubt on (...) my characterization of Salvador Dali’s humour as not trading on English language ambiguity. (shrink)

O livro Verdade e Linguagem em Nietzsche, organizado por André Luís Mota Itaparica e Márcio José Silveira Lima, reúne oito artigos apresentados por ocasião do XXXII Encontros Nietzsche, seminário promovido pelo Grupos de Estudos Nietzsche (GEN) e realizado em Salvador, em 2012. Publicada em 2014, a unidade da obra, como indica o título, passa pelo compartilhamento de uma temática comum: a relação entre linguagem e verdade no pensamento nietzschiano. Apesar de reconhecermos a estreiteza de uma tal relação, cabe ressaltar (...) que é o problema da linguagem que ocupa posição central, sendo, sem dúvidas, sua articulação com a verdade um elemento observado por diversos dos autores. Nesse sentido pode-se dizer que o leitor da obra descobre que o ponto mínimo para o qual convergem os autores é a importância da reflexão sobre a linguagem para os caminhos tomados pelo pensamento nietzschiano. Isso não significa, no entanto, que haja comunhão em torno de uma tese geral que apenas seria desdobrada por autores distintos. Pelo contrário, um dos méritos do livro reside justamente no fato de apresentar a complexidade e riqueza do pensamento nietzschiano a partir de uma certa temática. (shrink)

A lo largo de este libro se ofrece una interpretación novedosa y sugerente del pensamiento de David Hume y del Quijote, leído y citado por aquél, siendo una obra muy influyente en la Inglaterra de su tiempo. El autor pretende mostrar que la influencia del Quijote en el pensamiento de Hume es posible, probable y plausible, para lo cual ofrece diversos argumentos. Desarrolla su interpretación mostrando que un fragmento extraído del Quijote es indispensable para la postulación del criterio del gusto (...) en la teoría estética de Hume. Asimismo, muestra cómo a partir de los elementos de la Ciencia de la naturaleza humana y en especial del concepto de imaginación es posible realizar una interpretación coherente del Quijote, en donde se sugiere que la relación entre Cervantes y Hume va más allá del ámbito de la estética. (shrink)

Salvador Dali titled one of his books Diary of a Genius. You might think that anyone who would title his book thus must be a spoilt brat and should be “cured” of the illusion that he, or she, is so amazing. But it seems to me that there is a “position” one can occupy in which this is difficult.

On Cervantes ' "Don Quixote" so good as a fool. ISBN 978 84 686 6163 6 Published by Bubok Publishing S.L., 2015.

Esta entrevista retoma la experiencia de enseñanza de la profesora María Luisa Roel en función de la producción literaria de España. El objetivo es interiorizar sobre cómo esta se ha transferido en el ámbito de educación universitaria. A partir de la trayectoria de la docente, se brinda un panorama de cómo los estudiantes de la carrera profesional de Literatura acatan el conocimiento y la lectura de autores españoles, como Miguel de Cervantes. De igual forma, se mencionan dos momentos históricos (...) en los que se vería la presencia o la ausencia de esta producción: en la Literatura del Virreinato y la creación literaria contemporánea. (shrink)

continent. 1.1 : 3-13. / 0/ – Introduction I want to propose, as a trajectory into the philosophically weird, an absurd theoretical claim and pursue it, or perhaps more accurately, construct it as I point to it, collecting the ground work behind me like the Perpetual Train from China Mieville's Iron Council which puts down track as it moves reclaiming it along the way. The strange trajectory is the following: Kant's critical philosophy and much of continental philosophy which has followed, (...) has been a defense against horror and madness. Kant's prohibition on speculative metaphysics such as dogmatic metaphysics and transcendental realism, on thinking beyond the imposition of transcendental and moral constraints, has been challenged by numerous figures proceeding him. One of the more interesting critiques of Kant comes from the mad black Deleuzianism of Nick Land stating, “Kant’s critical philosophy is the most elaborate fit of panic in the history of the Earth.” And while Alain Badiou would certainly be opposed to the libidinal investments of Land's Deleuzo-Guattarian thought, he is likewise critical of Kant's normative thought-bureaucracies: Kant is the one author for whom I cannot feel any kinship. Everything in him exasperates me, above all his legalism—always asking Quid Juris? Or ‘Haven’t you crossed the limit?’—combined, as in today’s United States, with a religiosity that is all the more dismal in that it is both omnipresent and vague. The critical machinery he set up has enduringly poisoned philosophy, while giving great succour to the academy, which loves nothing more than to rap the knuckles of the overambitious [….] That is how I understand the truth of Monique David-Menard’s reflections on the properly psychotic origins of Kantianism. I am persuaded that the whole of the critical enterprise is set up to to shield against the tempting symptom represented by the seer Swedenborg, or against ‘diseases of the head’, as Kant puts it. An entire nexus of the limits of reason and philosophy are set up here, namely that the critical philosophy not only defends thought from madness, philosophy from madness, and philosophy from itself, but that philosophy following the advent of the critical enterprise philosophy becomes auto-vampiric; feeding on itself to support the academy. Following Francois Laruelle's non-philosophical indictment of philosophy, we could go one step further and say that philosophy operates on the material of what is philosophizable and not the material of the external world. [1] Beyond this, the Kantian scheme of nestling human thinking between our limited empirical powers and transcendental guarantees of categorical coherence, forms of thinking which stretch beyond either appear illegitimate, thereby liquefying both pre-critical metaphysics and the ravings of the mad in the same critical acid. In rejecting the Kantian apparatus we are left with two entities – an unsure relation of thought to reality where thought is susceptible to internal and external breakdown and a reality with an uncertain sense of stability. These two strands will be pursued, against the sane-seal of post-Kantian philosophy by engaging the work of weird fiction authors H.P. Lovecraft and Thomas Ligotti. The absolute inhumanism of the formers universe will be used to describe a Shoggothic Materialism while the dream worlds of the latter will articulate the mad speculation of a Ventriloquil Idealism. But first we must address the relation of philosophy to madness as well as philosophy to weird fiction. /1/ – Philosophy and Madness There is nothing that the madness of men invents which is not either nature made manifest or nature restored. Michel Foucault. Madness and Civilization. The moment I doubt whether an event that I recall actually took place, I bring the suspicion of madness upon myself: unless I am uncertain as to whether it was not a mere dream. Arthur Schopenhauer. The World as Will and Idea, Vol. 3. Madness is commonly thought of as moving through several well known cultural-historical shifts from madness as a demonic or otherwise theological force, to rationalization, to medicalization psychiatric and otherwise. Foucault's Madness and Civilization is well known for orientating madness as a form of exclusionary social control which operated by demarcating madness from reason. Yet Foucault points to the possibility of madness as the necessity of nature at least prior to the crushing weight of the church. Kant’s philosophy as a response to madness is grounded by his humanizing of madness itself. As Adrian Johnston points out in the early pages of Time Driven pre-Kantian madness meant humans were seized by demonic or angelic forces whereas Kantian madness became one of being too human. Madness becomes internalized, the external demonic forces become flaws of the individual mind. Foucault argues that, while madness is de-demonized it is also dehumanized during the Renaissance, as madmen become creatures neither diabolic nor totally human reduced to the zero degree of humanity. It is immediately clear why for Kant, speculative metaphysics must be curbed – with the problem of internal madness and without the external safeguards of transcendental conditions, there is nothing to formally separate the speculative capacities for metaphysical diagnosis from the mad ramblings of the insane mind – both equally fall outside the realm of practicality and quotidian experience. David-Menard's work is particularly useful in diagnosing the relation of thought and madness in Kant's texts. David-Menard argues that in Kant's relatively unknown “An Essay on the Maladies of the Mind” as well as his later discussion of the Seer of Swedenborg, that Kant formulates madness primarily in terms of sensory upheaval or other hallucinatory theaters. She writes: “madness is an organization of thought. It is made possible by the ambiguity of the normal relation between the imaginary and the perceived, whether this pertains to the order of sensation or to the relations between our ideas” Kant's fascination with the Seer forces Kant between the pincers of “aesthetic reconciliation” – namely melancholic withdrawal – and “a philosophical invention” – namely the critical project. Deleuze and Guattari's schizoanalysis is a combination and reversal of Kant's split, where an aesthetic over engagement with the world entails prolific conceptual invention. Their embrace of madness, however, is of course itself conceptual despite all their rhizomatic maneuvers. Though they move with the energy of madness, Deleuze and Guattari save the capacity of thought from the fangs of insanity by imbuing materiality itself with the capacity for thought. Or, as Ray Brassier puts it, “Deleuze insists, it is necessary to absolutize the immanence of this world in such a way as to dissolve the transcendent disjunction between things as we know them and as they are in themselves”. That is, whereas Kant relied on the faculty of judgment to divide representation from objectivity Deleuze attempts to flatten the whole economy beneath the juggernaut of ontological univocity. Speculation, as a particularly useful form of madness, might fall close to Deleuze and Guattari’s shaping of philosophy into a concept producing machine but is different in that it is potentially self destructive – less reliant on the stability of its own concepts and more adherent to exposing a particular horrifying swath of reality. Speculative madness is always a potential disaster in that it acknowledges little more than its own speculative power with the hope that the gibbering of at least a handful of hysterical brains will be useful. Pre-critical metaphysics amounts to madness, though this may be because the world itself is mad while new attempts at speculative metaphysics, at post-Kantian pre-critical metaphysics, are well aware of our own madness. Without the sobriety of the principle of sufficient reason we have a world of neon madness: “we would have to conceive what our life would be if all the movements of the earth, all the noises of the earth, all the smells, the tastes, all the light – of the earth and elsewhere, came to us in a moment, in an instant – like an atrocious screaming tumult of things”. Speculative thought may be participatory in the screaming tumult of the world or, worse yet, may produce its spectral double. Against theology or reason or simply commonsense, the speculative becomes heretical. Speculation, as the cognitive extension of the horrorific sublime should be met with melancholic detachment. Whereas Kant's theoretical invention, or productivity of thought, is self -sabotaging, since the advent of the critical project is a productivity of thought which then delimits the engine of thought at large either in dogmatic gestures or non-systematizable empirical wondrousness. The former is celebrated by the fiction of Thomas Ligotti whereas the latter is espoused by the tales of H.P. Lovecraft. /2/ – Weird Fiction and Philosophy. Supernatural horror, in all its eerie constructions, enables a reader to taste treats inconsistent with his personal welfare. Thomas Ligotti Songs of a Dead Dreamer. I choose weird stories because they suit my inclination best—one of my strongest and most persistent wishes being to achieve,momentarily, the illusion of some strange suspension or violation of the galling limitations of time, space, and natural law which forever imprison us and frustrate our curiosity about the infinite cosmic spaces beyond the radius of our sight and analysis H.P. Lovecraft. “Notes on Writing Weird Fiction” Lovecraft states that his creation of a story is to suspend natural law yet, at the same time, he indexes the tenuousness of such laws, suggesting the vast possibilities of the cosmic. The tension that Lovecraft sets up between his own fictions and the universe or nature is reproduced within his fictions in the common theme of the unreliable narrator; unreliable precisely because they are either mad or what they have witnessed questions the bounds of material reality. In “The Call of Cthulhu” Lovecraft writes: The most merciful thing in the world, I think, is the inability of the human mind to correlate all its contents. We live on a placid island of ignorance in the midst of black seas of infinity, and it was not meant that we should voyage far. The sciences, each straining in its own direction, have hitherto harmed us little; but some day the piecing together of dissociated knowledge will open up such terrifying vistas of reality, and of our frightful position therein, that we shall either go mad from the revelation or flee from the deadly light into the peace and safety of a new dark age. Despite Lovecraft's invocations of illusion, he is not claiming that his fantastic creations such as the Old Ones are supernatural but, following Joshi, are only ever supernormal. One can immediately see that instead of nullifying realism Lovecraft in fact opens up the real to an unbearable degree. In various letters and non-fictional statements Lovecraft espoused strictly materialist tenets, ones which he borrowed from Hugh Elliot namely the uniformity of law, the denial of teleology and the denial of non-material existence. Lovecraft seeks to explore the possibilities of such a universe by piling horror upon horror until the fragile brain which attempts to grasp it fractures. This may be why philosophy has largely ignored weird fiction – while Deleuze and Guattari mark the turn towards weird fiction and Lovecraft in particular, with the precursors to speculative realism as well as contemporary related thinkers have begun to view Lovecraft as making philosophical contributions. Lovecraft's own relation to philosophy is largely critical while celebrating Nietzsche and Schopenhauer. This relationship of Lovecraft to philosophy and philosophy to Lovecraft is coupled with Lovecraft's habit of mercilessly destroying the philosopher and the figure of the academic more generally in his work, a destruction which is both an epistemological destruction and an ontological destruction. Thomas Ligotti's weird fiction which he has designated as a kind of “confrontational escapism” might be best described in the following quote from one of his shortstories, “The human phenomenon is but the sum of densely coiled layers of illusion each of which winds itself on the supreme insanity. That there are persons of any kind when all there can be is mindless mirrors laughing and screaming as they parade about in an endless dream”. Whereas Lovecraft's weirdness draws predominantly from the abyssal depths of the uncharted universe, Ligotti's existential horror focuses on the awful proliferation of meaningless surfaces that is, the banal and every day function of representation. In an interview, Ligotti states: We don't even know what the world is like except through our sense organs, which are provably inadequate. It's no less the case with our brains. Our whole lives are motored along by forces we cannot know and perceptions that are faulty. We sometimes hear people say that they're not feeling themselves. Well, who or what do they feel like then? This is not to say that Ligotti sees nothing beneath the surface but that there is only darkness or blackness behind it, whether that surface is on the cosmological level or the personal. By addressing the implicit and explicit philosophical issues in Ligotti's work we will see that his nightmarish take on reality is a form of malevolent idealism, an idealism which is grounded in a real, albeit dark and obscure materiality. If Ligotti's horrors ultimately circle around mad perceptions which degrade the subject, it takes aim at the vast majority of the focus of continental philosophy. While Lovecraft's acidic materialism clearly assaults any romantic concept of being from the outside, Ligotti attacks consciousness from the inside: Just a little doubt slipped into the mind, a little trickle of suspicion in the bloodstream, and all those eyes of ours, one by one, open up to the world and see its horror [...] Not even the solar brilliance of a summer day will harbor you from horror. For horror eats the light and digests it into darkness. Clearly, the weird fiction of Lovecraft and Ligotti amount to a anti-anthrocentric onslaught against the ramparts of correlationist continental philosophy. /3/ – Shoggothic Materialism or the Formless Formless protoplasm able to mock and reflect all forms and organs and processes—viscous agglutinations of bubbling cells—rubbery fifteen-foot spheroids infinitely plastic and ductile—slaves of suggestion, builders of cities—more and more sullen, more and more intelligent, more and more amphibious, more and more imitative—Great God! What madness made even those blasphemous Old Ones willing to use and to carve such things? H.P. Lovecraft. “At the Mountains of Madness” On the other hand, affirming that the universe resembles nothing and is only formless amounts to saying that the universe is something like a spider or spit. Georges Bataille. “Formless”. The Shoggoths feature most prominently in H.P. Lovecraft's shortstory “At the Mountains of Madness” where they are described in the following manner: It was a terrible, indescribable thing vaster than any subway train – a shapeless congeries of protoplasmic bubbles, faintly self -luminous, and with myriads of temporary eyes forming and un-forming as pustules of greenish light all over the tunnel-filling front that bore down upon us, crushing the frantic penguins and slithering over the glistening floor that it and its kind had swept so evilly free of all litter. The term is a litmus test for materialism itself as the Shoggoth is an amorphous creature. The Shoggoths were living digging machines bio engineered by the Elder Things, and their protoplasmic bodies being formed into various tools by their hypnotic powers. The Shoggoths eventually became self aware and rose up against their masters in an ultimately failed rebellion. After the Elder Ones retreated into the oceans leaving the Shoggoths to roam the frozen wastes of the Antarctic. The onto-genesis of the Shoggoths and their gross materiality, index the horrifyingly deep time of the earth a concept near and dear to Lovecraft's formulation of horror as well as the fear of intelligences far beyond, and far before, the ascent of humankind on earth and elsewhere. The sickly amorphous nature of the Shoggoths invade materialism at large, where while materiality is unmistakably real ie not discursive, psychological, or otherwise overly subjectivist, it questions the relation of materialism to life. As Eugene Thacker writes: The Shoggoths or Elder Things do not even share the same reality with the human beings who encounter them—and yet this encounter takes place, though in a strange no-place that is neither quite that of the phenomenal world of the human subject or the noumenal world of an external reality. Amorphous yet definitively material beings are a constant in Lovecraft's tales. In his tale “The Dream-Quest of Unknown Kadatth” Lovecraft describes Azathoth as, “that shocking final peril which gibbers unmentionably outside the ordered universe,” that, “last amorphous blight of nethermost confusion which blashphemes and bubbles at the centre of all infinity,” who, “gnaws hungrily in inconceivable, unlighted chambers beyond time”. Azathoth's name may have multiple origins but the most striking is the alchemy term azoth which is both a cohesive agent and a acidic creation pointing back to the generative and the decayed. The indistinction of generation and degradation materially mirrors the blur between the natural and the unnatural as well as life and non-life. Lovecraft speaks of the tension between the natural and the unnatural is his short story “The Unnameable.” He writes, “if the psychic emanations of human creatures be grotesque distortions, what coherent representation could express or portray so gibbous and infamous a nebulousity as the spectre of a malign, chaotic perversion, itself a morbid blasphemy against Nature?”. Lovecraft explores exactly the tension outlined at the beginning of this chapter, between life and thought. At the end of his short tale Lovecraft compounds the problem as the unnameable is described as “a gelatin—a slime—yet it had shapes, a thousand shapes of horror beyond all memory”. Deleuze suggests that becoming-animal is operative throughout Lovecraft's work, where narrators feel themselves reeling at their becoming non-human or of being the anomalous or of becoming atomized. Following Eugene Thacker however, it may be far more accurate to say that Lovecraft's tales exhibit not a becoming-animal but a becoming-creature. Where the monstrous breaks the purportedly fixed laws of nature, the creature is far more ontologically ambiguous. The nameless thing is an altogether different horizon for thought. The creature is either less than animal or more than animal – its becoming is too strange for animal categories and indexes the slow march of thought towards the bizarre. This strangeness is, as aways, some indefinite swirling in the category of immanence and becoming. Bataille begins “The Labyrinth” with the assertion that being, to continue to be, is becoming. More becoming means more being hence the assertion that Bataille's barking dog is more than the sponge. This would mean that the Shoggotth is altogether too much being, too much material in the materialism. Bataille suggests that there is an immanence between the eater and the eaten, across the species and never within them. That is, despite the chaotic storm of immanence there must remain some capacity to distinguish the gradients of becoming without reliance upon, or at least total dependence upon, the powers of intellection to parse the universe into recognizable bits, properly digestible factoids. That is, if we undo Deleuze's aforementioned valorization of sense which, for his variation of materialism, performed the work of the transcendental, but refuse to reinstate Kant's transcendental disjunction between thing and appearance, then it must be a quality of becoming-as-being itself which can account for the discernible nature of things by sense. In an interview with Peter Gratton, Jane Bennett formulates the problem thusly: What is this strange systematicity proper to a world of Becoming? What, for example, initiates this congealing that will undo itself? Is it possible to identify phases within this formativity, plateaus of differentiation? If so, do the phases/plateaus follow a temporal sequence? Or, does the process of formation inside Becoming require us to theorize a non-chronological kind of time? I think that your student’s question: “How can we account for something like iterable structures in an assemblage theory?” is exactly the right question. Philosophy has erred too far on the side of the subject in the subject-object relation and has furthermore, lost the very weirdness of the non-human. Beyond this, the madness of thought need not override. /4/ - Ventriloquial Idealism or the Externality of Thought My aim is the opposite of Lovecraft's. He had an appreciation for natural scenery on earth and wanted to reach beyond the visible in the universe. I have no appreciation for natural scenery and want the objective universe to be a reflection of a character. Thomas Ligotti. “Devotees of Decay and Desolation.” Unless life is a dream, nothing makes sense. For as a reality, it is a rank failure [….] Horror is more real than we are. Thomas Ligotti. “Professor Nobody's Little Lectures on Supernatural Horror”. Thomas Ligotti's tales are rife with mannequins, puppets, and other brainless entities which of replace the valorized subject of philosophy – that of the free thinking human being. His tales such as “The Dream of the Manikin” aim to destroy the rootedness of consciousness. James Trafford has connected the anti-egoism of Ligotti to Thomas Metzinger – where the self is at best an illusion and we plead desperately for someone else to acknowledge that we are real. Trafford has stated it thus, “Life is played out as an inescapable puppet show, an endless dream in which the puppets are generally unaware that they are trapped within a mesmeric dance of whose mechanisms they know nothing and over which they have no control”. An absolute materialism, for Ligotti, implies an alienation of the idea which leads to a ventriloquil idealism. As Ligotti notes in an interview, “the fiasco and nightmare of existence, the particular fiasco and nightmare of human existence, the sense that people are puppets of powers they cannot comprehend, etc.” And then further elaborates that,“[a]ssuming that anything has to exist, my perfect world would be one in which everyone has experienced the annulment of his or her ego. That is, our consciousness of ourselves as unique individuals would entirely disappear”. The externality of the idea leads to the unfortunate consequence of consciousness eating at itself through horror which, for Ligotti, is more real than reality and goes beyond horror-as-affect. Beyond this, taking together with the unreality of life and the ventriloquizing of subjectivity, Ligotti's thought becomes an idealism in which thought itself is alien and ultimately horrifying. The role of human thought and the relation of non-relation of horror to thought is not completely clear in Ligotti's The Conspiracy Against the Human Race. Ligotti argues in his The Conspiracy Against the Human Race,that the advent of thought is a mistake of nature and that horror is being in the sense that horror results from knowing too much. Yet, at the same time, Ligotti seems to suggest that thought separates us from nature whereas, for Lovecraft, thought is far less privileged – mind is just another manifestation of the vital principal, it is just another materialization of energy. In his brilliant “Prospects for Post-Copernican Dogmatism” Iain Grant rallies against the negative definition of dogmatism and the transcendental, and suggests that negatively defining both over-focuses on conditions of access and subjectivism at the expense of the real or nature. With Schelling, who is Grant's champion against the subjectivist bastions of both Fichte and Kant, Ligotti's idealism could be taken as a transcendental realism following from an ontological realism. Yet the transcendental status of Ligotti's thought move towards a treatment of the transcendental which may threaten to leave beyond its realist ground. Ligotti states: Belief in the supernatural is only superstition. That said, a sense of the supernatural, as Conrad evidenced in Heart of Darkness, must be admitted if one's inclination is to go to the limits of horror. It is the sense of what should not be- the sense of being ravaged by the impossible. Phenomenally speaking, the super-natural may be regarded as the metaphysical counterpart of insanity, a transcendental correlative of a mind that has been driven mad. Again, Ligotti equates madness with thought, qualifying both as supernatural while remaining less emphatic about the metaphysical dimensions of horror. The question becomes one of how exactly the hallucinatory realm of the ideal relates to the black churning matter of Lovecraft's chaos of elementary particles. In his tale “I Have a Special Plan for This World” Ligotti formulates thus: A: There is no grand scheme of things. B: If there were a grand scheme of things, the fact – the fact – that we are not equipped to perceive it, either by natural or supernatural means, is a nightmarish obscenity. C: The very notion of a grand scheme of things is a nightmarish obscenity. Here Ligotti is not discounting metaphysics but implying that if it does exist the fact that we are phenomenologically ill-equipped to perceive that it is nightmarish. For Ligotti, nightmare and horror occur within the circuit of consciousness whereas for Lovecraft the relation between reality and mind is less productive on the side of mind. It is easier to ascertain how the Kantian philosophy is a defense against the diseases of the head as Kant armors his critical enterprise from too much of the world and too much of the mind. The weird fiction of both Lovecraft and Ligotti demonstrates that there is too much of both feeding into one another in a way that corrodes the Kantian schema throughly, breaking it down into a dead but still ontologically potentiated nigredo. The haunting, terrifying fact of Ligotti's idealism is that the transcendental motion which brought thought to matter, while throughly material and naturalized, brings with it the horror that thought cannot be undone without ending the material that bears it either locally or completely. Thought comes from an elsewhere and an elsewhen being-in-thought. The unthinkable outside thought is as maddening as the unthought engine of thought itself within thought which doesn't exist except for the mind, the rotting décor of the brain. /5/ - Hyperstitional Transcendental Paranoia or Self -Expelled Thought Weird fiction has been given some direct treatment in philosophy in the mad black Deleuzianism of Nick Land. Nick Land along with others in the 1990s created the Cyber Culture Research Unit as well as the research group Hyperstition. The now defunct hyperstitional website, an outgrowth of the Cyber Culture Research Unit, defined hyperstition in the following fourfold: 1-Element of effective culture that makes itself real. 2-Fictional quantity functional as a time-traveling device. 3-Coincidence intensifier. 4-Call to the Old Ones. The distinctively Lovecraftian character of hyperstition is hard to miss as is its Deleuzo-Guattarian roots. In the opening pages of A Thousand Plateaus Deleuze and Guattari write, “We have been criticized for over-quoting literary authors. But when one writes, the only question is which other machine the literary machine can be plugged into”. The indisinction of literature and philosophy mirrors the mess of being and knowing as post-correlationist philosophy, where philosophy tries to make itself real where literature, especially the weird, aims itself at the brain-circuit of horror. The texts of both Lovecraft and Ligotti work through horror as epistemological plasticity meeting with proximity as well as the deep time of Lovecraft and the glacially slow time of paranoia in Ligotti. Against Deleuze, and following Brassier, we cannot allow the time of consciousness, the Bergsonian time of the duree, to override natural time, but instead acknowledge that it is an unfortunate fact of existence as a thinking being. Horror-time, the time of consciousness, with all its punctuated moments and drawn out terrors, cannot compare to the deep time of non-existence both in the unreachable past and the unknown future. The crystalline cogs of Kant's account of experience as the leading light for the possibility of metaphysics must be throughly obliterated. His gloss of experience in Prolegomena to any Future Metaphysics could not be more sterile: Experience consists of intuitions, which belong to the sensibility, and of judgments, which are entirely a work of the understanding. But the judgments which the understanding makes entirely out of sensuous intuitions are far from being judgments of experience. For in the one case the judgment connects only the perceptions as they are given in sensuous intuition [....] Experience consists in the synthetic connection of appearances in consciousness, so far as this connection is necessary. Here it is difficult to dismiss the queasiness that Kant's legalism induces upon sight for both Badiou and David-Menard. Kant's thought becomes, as Foucault says when reflecting on Sade's text in relation to nature, “the savage abolition of itself”. For Badiou, Kant's philosophy simply closes off too much of the outside, freezing the world of thought in an all too limited formalism. Critical philosophy is simply the systematized quarantine on future thinking, on thinking which would threaten the formalism which artificially grants thought its own coherency in the face of madness. Even the becoming-mad of Deleuze, while escaping the rumbling ground, makes grounds for itself, mad grounds but grounds which are thinkable in their affect. The field of effects allows for Deleuze's aesthetic and radical empiricism, in which effects and/or occasions make up the material of the world to be thought as a chaosmosis of simulacra. Given a critique of an empiricism of aesthetics, of the image, it may be difficult to justify an attack on Kantian formalism with the madness of literature, which does not aim to make itself real but which we may attempt to make real. That is, how do Lovecraft's and Ligotti's materials, as materials for philosophy to work on, differ from either the operative formalisms of Kant or the implicitly formalized images of Deleuzian empiricism? It is simply that such texts do not aim to make themselves real, and make claims to the real which are more alien to us than familiar, which is why their horror is immediately more trustworthy. This is the madness which Blanchot discusses in The Infinite Conversation through Cervantes and his knight – the madness of book-life, of the perverse unity of literature and life a discussion which culminates in the discussion of one of the weird's masters, that of Kafka. The text is the knowing of madness, since madness, in its moment of becoming-more-mad, cannot be frozen in place but by the solidifications of externalizing production. This is why Foucault ends his famous study with works of art. Furthermore extilligence, the ability to export the products of our maligned brains, is the companion of the attempts to export, or discover the possibility of intelligences outside of our heads, in order for philosophy to survive the solar catastrophe. To borrow again from Deleuze, writing is inseparable from becoming. The mistake is to believe that madness is reabsorbed by extilligence, by great works, or that it could be exorcised by the expelling of thought into the inorganic or differently organic. Going out of our heads does not guarantee we will no longer mean we cannot still go out of our minds. This is simply because of the outside, of matter, or force, or energy, or thing-in-itself, or Schopenhauerian Will. In Lovecraft’s “The Music of Erich Zahn” an “impoverished student of metaphysics” becomes intrigued by strange viol music coming from above his room. After meeting the musician the student discovers that each night he plays frantic music at a window in order to keep some horridness at bay, some “impenetrable darkness with chaos and pandemonium”. The aesthetic defenses provided by the well trained brain can bear the hex of matter for so long, the specter of unalterability within it which too many minds obliterate, collapsing everything before the thought of thought as thinkable or at least noetically mutable on our own terms. Transcendental paranoia is the concurrent nightmare and promise of Paul Humphrey's work, of being literally out of our minds. It is the gothic counterpart of thinking non-conceptually but also of thinking never belonging to any instance of purportedly solid being. As Bataille stated, “At the boundary of that which escapes cohesion, he who reflects within cohesion realizes there is no longer any room for him” Thought is immaterial only to the degree that it is inhuman, it is a power that tries, always with failure, to ascertain its own genesis. Philosophy, if it can truly return to the great outdoors, if it can leave behind the dead loop of the human skull, must recognize not only the non-priority of human thought, but that thought never belongs to the brain that thinks it, thought comes from somewhere else. To return to the train image from the beginning “a locomotive rolling on the surface of the earth is the image of continuous metamorphosis” this is the problem of thought, and of thinking thought, of being no longer able to isolate thought, with only a thought-formed structure. [1] One of the central tenets of Francois Laruelle's non-philosophy is that philosophy has traditionally operated on material already presupposed as thinkable instead of trying to think the real in itself. Philosophy, according to Laruelle, remains fixated on transcendental synthesis which shatters immanence into an empirical datum and an a prori factum which are then fused by a third thing such as the ego. For a critical account of Laruelle's non-philosophy see Ray Brassier's Nihil Unbound. (shrink)

This essay considers the relation between Don Quixote's hunger and the disenchantment (Entzauberung) that Max Weber understood as paradigmatic of the modern condition. Whereas hunger functions within a Hegelian dialectic of desire in Cervantes' novel, literary representations of hunger from later periods (in Kafka and post-Holocaust Polish poetry) acknowledge the cosmic insignificance of human need by substituting the desire for recognition with a desire for self-abdication. While Don Quixote's hunger drives him to seek recognition for his dream world, modern (...) literature's hungry heroes respond to hunger by changing their metaphysical identities. Like desire, hunger functions in the literatures of modernity as an index of psychic wholeness or of its lack, both enabling and resisting the hero's assimilation with the world outside the self. (shrink)

The practice of Ontography deployed by OOO, clarified and expanded in this essay, produces a highly productive framework for analyzing Salvador Dalí’s ontological project between 1928 and 1935. Through the careful analysis of paintings and original texts from this period, we establish the antecedents for Dalí’s theorization of Surrealist objects in Cubism and Italian Metaphysical art, which we collectively refer to as ‘Ontographic art,’ drawing parallels with the tenets of Graham Harman’s and Ian Bogost’s object-oriented philosophical programmes. We respond (...) to the question raised by Roger Rothman concerning Object-Oriented Idealism in Dalí’s work by showing pivotal changes to Dalí’s ontological outlook, from Idealism to Realism, across the aforementioned period, positing the Ontographic intentionality of Dalí’s ontological project in Surrealist art. (shrink)

El Foro Global de Bioética en Investigación (GFBR por sus siglas en inglés) se reunió el 3 y 4 de noviembre en Buenos Aires, Argentina, con el objetivo de discutir la ética de la investigación con mujeres embarazadas. El GFBR es una plataforma mundial que congrega a actores clave con el objetivo de promover la investigación realizada de manera ética, fortalecer la ética de la investigación en salud, particularmente en países de ingresos bajos y medios, y promover colaboración entre países (...) del norte y del sur.a Los participantes en el GFBR provenientes de Latinoamérica incluyeron a eticistas, investigadores, miembros de comités de ética y representantes de autoridades sanitarias provenientes de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Panamá, Perú, Nicaragua y la República Dominicana. Una legítima preocupación por la protección de las mujeres embarazadas y sus embriones o fetos ha llevado a la mayoría de los países de la Región de las Américas a limitar la realización de estudios con mujeres embarazadas exclusivamente a aquellos estudios específicos sobre el embarazo, y a requerir la exclusión sistemática de las mujeres embarazadas o de las mujeres que quedan embarazadas en el curso del estudio. Ciertamente, a lo largo de la historia de la ética de la investigación, se ha creído erróneamente que proteger a una población es sinónimo de excluirla de los estudios. Se sabe ahora que proceder así implica exponer a riesgos mucho mayores a la población que se busca proteger. El embarazo implica cambios fisiológicos sustantivos e impacta profundamente la manera como el cuerpo metaboliza los medicamentos. Sin embargo, por evitar hacer investigación con mujeres embarazadas, no se ha producido la evidencia científica necesaria para tomar decisiones sobre tratamientos e intervenciones preventivas con dosis eficaces y seguras para ellas y sus embriones o fetos. A manera de ilustración, en el 2001 había en los Estados Unidos apenas más de una docena de medicamentos aprobados para uso en el embarazo (1) y en el 2011 la Food and Drug Administration (FDA) aprobó por primera vez en 15 años un medicamento para su uso en el embarazo (2). Como consecuencia de no haber producido la evidencia necesaria, se pone en riesgo la salud de las mujeres embarazadas cada vez que se les da atención médica. Las mujeres embarazadas se enferman y las mujeres enfermas se embarazan, y no se sabe si los medicamentos que se les da son eficaces o siquiera seguros para ellas y sus embriones o fetos. (shrink)

A combined psychological-epistemological study of the human blocks that stand in the way of the recognition of non-human animal sentience and legal rights. This is a Portuguese translation of the author's paper, "Roots of Human Resistance to Animal Rights: Psychological and Conceptual Blcoks," originally published in the Lewis and Clark law review, Animal Righs, in 2002. The Portuguese version was presented in conjunction with the International Congress on Animal Rights, Salvador, Brazil, Oct. 8-11, 2008, and published in the Revista (...) Brasileira de Direito Animal. (shrink)

Este artículo reconstruye el contexto histórico y cinematográfico que permitió que la película de Luis Buñuel y Salvador Dalí tuviera una intencionalidad distinguible. Para demostrar ese acápite, retomo los estudios críticos que se han hecho en torno a este cortometraje, así como las categorías pertinentes de las vanguardias del dadaísmo y el surrealismo, junto con el psicoanálisis de Sigmund Freud y Jacques Lacan. Con todo ello, propongo que el objetivo de este trabajo es fundamentar las razones que generaron que (...) esta producción fílmica estuviera orientada a transgredir lo tradicional y lo ético de la sociedad europea. Esa volición solo se lograría desde la epifanía de su arte onírico e inconexo. (shrink)

Resumen. La presente investigación pretende analizar los costos y beneficios económicos de una dolarización oficial en México, tomando como punto de referencia los casos de Panamá, El Salvador y Ecuador, quienes han tenido un éxito significativo con la dolarización, como una medida para mejorar su estabilidad macroeconómica y erradicar las devaluaciones de sus monedas con respecto al dólar. Abstract. This research aims to analyze the economic costs and benefits of official dollarization in Mexico, taking as reference the case of (...) Panama, El Salvador and Ecuador, who have had significant success with dollarization, as a measure to improve its macroeconomic stability and eradicate the devaluations of their currencies against the dollar. (shrink)

Ziel des Beitrages ist die differenzierende Beschreibung des Projekts Cybersyn sowie die anschließende kritische Perspektivierung ausgewählter neokybernetischer Governance-Konzepte, die in den letzten Jahren verstärkt im Policy-Kontext diskutiert wurden. Die „Entscheidungsmaschine“ Stafford Beers, die der Management-Kybernetiker unter Salvador Allende in den frühen Siebzigern konzipierte, wird zumeist als Projekt eines technisch avancierten, ökonomischen Organisationskonzepts, eines „dritten Wegs“ beschrieben. Der Beitrag diskutiert die Grundkonzeption des „sozialistischen Internets“, seine fortschrittlichen, ökonomischen Ideen und Ästhetiken wie auch die Person Stafford Beer, legt den Fokus aber (...) vor allem auf ein eher selten beschriebenes Teilkonzept, namentlich „Cyberfolk“, eine Art binäres, affektives Echtzeit-Stimmungsbarometer der Bevölkerung zur Live-Bewertung von politischen Reden. In diesem Konnex werden gerade die demokratietheoretischen Implikationen von Cybersyn und seine Vorstellung „totaler Transparenz“ genauer untersucht. Im Anschluss wird expliziert, wie sich in unterschiedlichen gegenwärtigen Konzeptionen fluider Techno- bzw. technoider Expertokratien – von den „smart states“ Beth Novecks bis zur „direct technocracy“ Parag Khannas – die „Kybernetisierung des Politischen“ auch im digitalen Zeitalter – gewissermaßen unter umgekehrtem, d.h. neoliberalen Vorzeichen – revitalisiert und dabei sowohl problematische Partizipations- als auch Emanzipationskonzepte umreisst. Zu untersuchen sind in dieser Hinsicht so auch die reduktiven Aspekte der Beerschen letztlich feedbacklogischen Konzeption des Politischen. (shrink)

This fourteenth volume of Collected Papers is an eclectic tome of 87 papers in Neutrosophics and other fields, such as mathematics, fuzzy sets, intuitionistic fuzzy sets, picture fuzzy sets, information fusion, robotics, statistics, or extenics, comprising 936 pages, published between 2008-2022 in different scientific journals or currently in press, by the author alone or in collaboration with the following 99 co-authors (alphabetically ordered) from 26 countries: Ahmed B. Al-Nafee, Adesina Abdul Akeem Agboola, Akbar Rezaei, Shariful Alam, Marina Alonso, Fran Andujar, (...) Toshinori Asai, Assia Bakali, Azmat Hussain, Daniela Baran, Bijan Davvaz, Bilal Hadjadji, Carlos Díaz Bohorquez, Robert N. Boyd, M. Caldas, Cenap Özel, Pankaj Chauhan, Victor Christianto, Salvador Coll, Shyamal Dalapati, Irfan Deli, Balasubramanian Elavarasan, Fahad Alsharari, Yonfei Feng, Daniela Gîfu, Rafael Rojas Gualdrón, Haipeng Wang, Hemant Kumar Gianey, Noel Batista Hernández, Abdel-Nasser Hussein, Ibrahim M. Hezam, Ilanthenral Kandasamy, W.B. Vasantha Kandasamy, Muthusamy Karthika, Nour Eldeen M. Khalifa, Madad Khan, Kifayat Ullah, Valeri Kroumov, Tapan Kumar Roy, Deepesh Kunwar, Le Thi Nhung, Pedro López, Mai Mohamed, Manh Van Vu, Miguel A. Quiroz-Martínez, Marcel Migdalovici, Kritika Mishra, Mohamed Abdel-Basset, Mohamed Talea, Mohammad Hamidi, Mohammed Alshumrani, Mohamed Loey, Muhammad Akram, Muhammad Shabir, Mumtaz Ali, Nassim Abbas, Munazza Naz, Ngan Thi Roan, Nguyen Xuan Thao, Rishwanth Mani Parimala, Ion Pătrașcu, Surapati Pramanik, Quek Shio Gai, Qiang Guo, Rajab Ali Borzooei, Nimitha Rajesh, Jesús Estupiñan Ricardo, Juan Miguel Martínez Rubio, Saeed Mirvakili, Arsham Borumand Saeid, Saeid Jafari, Said Broumi, Ahmed A. Salama, Nirmala Sawan, Gheorghe Săvoiu, Ganeshsree Selvachandran, Seok-Zun Song, Shahzaib Ashraf, Jayant Singh, Rajesh Singh, Son Hoang Le, Tahir Mahmood, Kenta Takaya, Mirela Teodorescu, Ramalingam Udhayakumar, Maikel Y. Leyva Vázquez, V. Venkateswara Rao, Luige Vlădăreanu, Victor Vlădăreanu, Gabriela Vlădeanu, Michael Voskoglou, Yaser Saber, Yong Deng, You He, Youcef Chibani, Young Bae Jun, Wadei F. Al-Omeri, Hongbo Wang, Zayen Azzouz Omar. (shrink)

La presente compilación de textos es la segunda obra colectiva fruto del trabajo del grupo de investigadores que forman parte del proyecto La Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), sus políticas públicas y los valores fundacionales de la integración latinoamericana y caribeña, radicado en la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas, Cuba. La temática abordada en esta obra (la evaluación de políticas públicas en América Latina) es continuidad lógica del primer libro de nuestro grupo de investigación, intitulado Políticas públicas. (...) Teoría y práctica en el escenario latinoamericano, publicado en 2018 bajo el sello de la Editorial Feijóo. En aquella obra se expuso una crítica constructiva al manejo de las políticas públicas por parte de los gobiernos progresistas instalados en el poder en América Latina en los tres primeros lustros del actual siglo. Consideramos constructiva la crítica realizada en aquel texto, pues la misma partió de un cuestionamiento a la teoría sobre política pública, a sus preceptos teóricos, al escaso arsenal sobre evaluación producido por los teóricos clásicos de esta materia, y particularmente a las interpretaciones y formas de aplicación de la política pública en todo el subcontinente americano, aun cuando el interés fundamental del proyecto eran los países del ALBA. Aunque el proyecto integracionista ALBA constituye nuestro objeto de estudio declarado, para los investigadores del grupo está claro que cualquier proceso de integración regional en América Latina solo se sostendrá si está cobijado por la unidad de los pueblos latinoamericanos y caribeños en torno a la defensa de su soberanía, identidad cultural y desarrollo autóctono. Respecto a ello, el memorable líder cubano Fidel Castro, en la Cumbre Iberoamericana de Salvador de Bahía, argumentó que: «La cuestión no estriba en que cada país de nuestra área trate de salvarse por sí mismo, porque es un sueño imposible en un mundo dominado hoy por gigantes industriales y políticos. Tenemos necesidad de crear entre todos un gigante, para poder realmente desarrollarnos y disfrutar de paz, independencia y seguridad». En vista de ello, casi desde el inicio del proceso investigativo nos inclinamos a ampliar nuestras indagaciones al resto de América Latina, lo que condujo a que en este texto (y muy probablemente en las entregas futuras sobre el tema de las políticas públicas en América Latina), aparecieran trabajos que no abordaban a los países que integran o integraron el ALBA-TCP, sino a otros países del subcontinente. La evaluación de políticas públicas en América Latina fue abordada desde varios ángulos y con distintos grados de profundidad, lo que generó diversos tipos de resultados. Algunos de estos no alcanzaron el nivel de coherencia requerido para su publicación inmediata, pero de igual forma fueron muy valiosos para el aprendizaje colectivo realizado en los talleres de discusión del proyecto, por lo que damos gracias a todos los esfuerzos e intentos realizados. Dado el escaso desarrollo sobre la cuestión de la evaluación de políticas públicas y especialmente el escaso desarrollo de este acápite en América Latina, no era posible pretender lograr evaluaciones rigurosas en un primer momento. Para el grupo de investigadores era esencial ganar en cultura de evaluación y hacer conciencia sobre este aspecto, que es el objetivo central de este libro. En vista de ello, el asunto de la evaluación de políticas públicas en América Latina se abordó desde el ámbito teórico general, enfatizando en su necesidad y rigurosidad, y desde experiencias concretas de evaluación en diversos países. En varios casos, estas experiencias no podemos identificarlas con evaluaciones propiamente dichas, sino con valoraciones o acercamientos a la evaluación, que contribuyen igualmente a elevar la cultura en este aspecto y a la conciencia de la necesidad de evaluación. (shrink)

GAMETOGÊNESE -/- Emanuel Isaque Cordeiro da Silva Instituto Agronômico de Pernambuco Departamento de Zootecnia – UFRPE Embrapa Semiárido -/- • _____OBJETIVO -/- Os estudantes bem informados, estão a buscando conhecimento a todo momento. O estudante de Veterinária e Zootecnia, sabe que a Reprodução é uma área de primordial importância para sua carreira. Logo, o conhecimento da mesma torna-se indispensável. No primeiro trabalho da série fisiologia reprodutiva dos animais domésticos, foi abordado de forma clara, didática e objetiva os mecanismos de diferenciação (...) sexual dos embriões em desenvolvimento, quais os genes envolvidos nesse processo e tudo mais. Nesse segundo trabalho, a abordagem será teórica, mas também clara, sobre a formação primordial dos gametas femininos e masculinos, através da ovogênese nas fêmeas e a espermatogênese nos machos. Esse trabalho visa levar a importância do processo de formação dos gametas e a produção hormonal das gônadas, bem como o entendimento sobre as interações com o eixo hipotálamo-hipofisário. -/- •____INTRODUÇÃO -/- A reprodução sexual é um processo mediante a qual dois organismos da mesma espécie unem seu material genético para dar lugar a um organismo fixo com combinação única de genes; para isso, cada organismo produz células que contém a metade do material genético característico da espécie. Essas células haploides (1n) são denominadas gametas; ao combinar-se um gameta masculino com um feminino produz-se uma célula diploide (2n) (zigoto ou ovo) a partir da qual se forma o embrião. A grande maioria das espécies com reprodução sexual são anisogâmicas, o que significa que produzem dois tipos de gametas diferentes: os gametas masculinos são microscópios, móveis e produzem-se em grande quantidade, enquanto que os femininos são grandes, imóveis e produzem-se em menor quantidade. O tipo de gameta que um indivíduo produz é o que define seu sexo; sobre os animais o macho é o indivíduo que produz grandes quantidades de espermatozoides e a fêmea produz uma menor quantidade de óvulos, enquanto que nas plantas as gônadas masculinas são as produtoras pólen e as femininas produzem oosferas. Os gametas são diferentes do resto das células do organismo, as quais se chamam células somáticas; essas últimas são diploides porque contém dois pares de cromossomos, um par herdado do pai do indivíduo e o outro da mãe. As células somáticas, ademais, se dividem por mitose, ao qual os cromossomos se duplicam antes de cada divisão celular e cada uma das células filhas recebe um complemento diploide idêntico dos cromossomos, logo todas as células somáticas de um indivíduo possuem o mesmo material genético, embora cada tipo celular expresse diferentes combinações de genes. Em contraponto, os gametas são células haploides porque possuem somente um par de cromossomos e a metade do material genético característico da espécie. Cada um dos cromossomos em um gameta é resultado da recombinação dos genes contidos nos cromossomos paterno e materno do indivíduo que originam o gameta, e cada um destes possuem uma combinação única de genes. Os gametas se formam a partir das células germinais, que são células que em sua origem são diploides e elas de “comprometem” a manter-se como uma linha celular especial que em determinado momento sofrerá o processo de meiose para dar origem aos gametas haploides, sejam óvulos ou espermatozoides segundo o sexo do animal. Como descrito no trabalho sobre a diferenciação sexual, as células germinativas primordiais originam-se no epiblasto do embrião, e migram desde o saco vitelino até colonizar as cristas gonodais, onde, por sua vez, proliferam-se e se organizam junto com as células somáticas da gônada primitiva para formar o testículo ou o ovário. As células germinais masculinas e femininas tem a mesma origem embrionária. As gônadas indiferenciadas em um embrião possuem três tipos celulares: as células que dão origem aos gametas (ovogonia ou espermatogonia), as precursoras de células que nutrem os gametas em desenvolvimento (células da granulosa no ovário; células de Sertoli no testículo) e as precursoras de células que secretam hormônios sexuais (células da teca no ovário; células de Leydig no testículo). As células germinais são as únicas estruturas do organismo que têm a capacidade de dividir-se por meiose sofrendo uma redução no número de seus cromossomos, sendo responsável pela transmissão da carga genética aos descendentes. Em contraste, as células somáticas somente se dividem por mitose. A formação dos gametas compreende fases sequenciais de mitose, meiose e pós-meiose. Esses processos são altamente organizados e necessitam de um preciso e bem coordenado programa de expressão genética. Uma das características importantes da gametogênese é a redução cromossômica, que através da meiose, reduz pela metade o número de cromossomos e produz células distintas entre si, devido a trocas de material genético entre os pares de cromossomos provenientes do pai e da mãe, o que ocorre no processo de “crossing over” durante a primeira fase da meiose. A gametogênese é o processo mediante o qual as células germinais de cada sexo se multiplicam, dividem e diferenciam até formar os gametas. No caso da formação dos gametas masculinos o processo recebe o nome específico de espermatogênese, e para os gametas femininos é denominado como ovogênese. Embora os dois processos alcancem o objetivo comum de produção das células haploides, por onde compartilham algumas características, existem diferenças marcadas entre eles devido a necessidade de produzir um número muito distinto de gametas, de tamanho diferente, e com características de motilidade também distintas. -/- •___ESPERMATOGÊNESE -/- A espermatogênese é o processo mediante o qual se produz os gametas masculinos denominados espermatozoides. Durante a vida fetal as células germinais e as células somáticas do testículo em formação organizam-se em túbulos seminíferos que se derivam dos cordões sexuais primários e conformam a maior parte da medula do testículo. Na etapa fetal cada tubo seminífero é delimitado por uma membrana basal, recoberta na parte interior pelas células precursoras das células de Sertoli (um tipo de células somáticas). No exterior do túbulo localizam-se as células precursoras das células de Leydig ou intersticiais (figura 1), que também são células somáticas. Entre a membrana basal e as células de Sertoli encontram-se algumas células germinais denominadas espermatogonias de reserva A0 (denominadas gonócitos) que serão o único tipo de células germinais presentes no testículo enquanto o animal não alcançar a puberdade. As células de Sertoli estabelecem na região basal uniões oclusoras entre si, formando parte da barreira hemato-testicular. As espermatogonias A0 localizam-se por dentro da membrana basal do túbulo seminífero, embora fora da barreira hemato-testicular. Figura 1: fase neonatal. Nota-se a grande infiltração de tecido intersticial em quase 50% da seção originando que os túbulos sejam pequenos e redondos em sua maioria. O citoplasma e núcleo das células pré-Leydig são notadas claramente por essa ser uma espécie suína onde o tecido intersticial está claramente diferenciado. Hematoxilina-eosina (X 220.5). Fonte: Embrapa. -/- O número de células de Sertoli no testículo depende da influência do hormônio folículo estimulante (FSH) presente durante a vida fetal e as primeiras etapas de vida pós-natal. A população de células de Sertoli ao chegar a puberdade se manterá fixa durante o resto da vida do animal; existe uma relação positiva entre o tamanho e a população de células de Sertoli e a capacidade de produção de espermatozoides do testículo. As células de Sertoli são as únicas células somáticas que estão no epitélio seminífero, e sua função é a nutrição, sustentação e controle endócrino das células germinais. As células de Sertoli participam ativamente no processo de liberação dos espermatozoides para a luz do túbulo. Nesse momento, as células de Sertoli realizam a fagocitose de parte do citoplasma do espermatozoide dos chamados corpos residuais. As células de Sertoli também fagocitam as células germinais que se degeneram no curso normal da espermatogênese. Essas células ainda sintetizam grande quantidade de proteínas, como por exemplo as proteínas ABP (androgen hinding protein), que transportam andrógenos para todo o aparelho reprodutivo, transferrinas, que transportam ferro para a respiração celular das células germinais e também às inibinas, que regulam a liberação de FSH pela hipófise, através de um sistema de retroalimentação (feedback) negativa (figura 2). Figura 2: epitélio seminífero, células de Sertoli (flecha) (400 X). Fonte: Embrapa. -/- Antes da puberdade dos túbulos seminíferos observam-se ao corte como estruturas de diâmetro pequeno, sem luz, e conformados unicamente pelas células de Sertoli e espermatogonias de reserva e rodeados por abundante tecido intersticial, ao que estão presentes as células precursoras das células de Leydig. Ainda antes da puberdade, a diferenciação celular manifesta-se primeiro pela presença de espermatócitos primários, os quais se degeneram em geral na fase de paquíteno, por falta de estimulação hormonal. A partir de que o animal chega a puberdade inicia-se o processo de espermatogênese, que se manterá durante toda a vida do animal, exceto em espécies de animais silvestres muito estacionais, ao qual pode se suspender durante a época não reprodutiva para voltar e ser retomada na época ou estação reprodutiva. Depois da puberdade, os túbulos seminíferos possuem um diâmetro muito maior; em seu interior observa-se um grande número de células germinais de todos os tipos, diferentes estádios de divisão, e em seu lúmen contém líquido e espermatozoides. Ainda sobre o alcancei da puberdade, as espermatogonias começam a dividir-se aceleradamente por mitose, enquanto que no espaço intersticial as células mesenquimais também começam a se diferenciar e a dar origem as células de Leydig (figura 3). A partir dessa etapa as células de Leydig (totalmente diferenciadas) são também evidentes no exterior do túbulo, junto com as células mioides ou peritubulares que o rodeiam o que ao contrair-se são responsáveis por controlar o avanço dos fluidos e as células presentes no lúmen do túbulo. As células mioides estão situadas ao redor do túbulo, e é creditado a elas a promoção da contração e da integridade estrutural do túbulo. Esse tipo celular apenas se diferencia na puberdade pela ação dos andrógenos (figura 4). As interações entre as células de Sertoli e as mioides parecem ter um papel importante na manutenção das funções do testículo. Durante o processo de espermatogênese, as espermatogonias de reserva dividem-se periodicamente e enquanto algumas células fixas permanecem como espermatogonias de reserva, outras proliferam e sofrem uma seção de divisões mitóticas durante as quais se vão diferenciando até formarem espermatócitos primários (espermatocitogênese ou fase de mitose), logo sofrem divisões especiais mediante as quais reduzem seu número de cromossomos (fase de meiose), e ao final trocam de forma para converter-se em espermatozoides (espermatocitogênese) (figura 5). Cada uma dessas etapas da espermato- gênese será descrito detalhadamente adiante, antes é necessário a explicação de algumas características das células de Sertoli e de Leydig que ajudarão a entender seu papel durante a espermatogênese. Figura 3: células de Leydig no espaço intersticial do testículo bovino adulto PAS (400 X). Fonte: Embrapa. -/- Figura 4: o estabelecimento da puberdade pela presença de espermatozoides no túbulo. Hematoxilina-eosina (400 X). Fonte: Embrapa. Figura 5: fases mitóticas das espermatogonias (A0 e B) para formação de um espermatócito primário e as duas fases de meiose que se sucedem antes da espermatogênese. Fonte: ZARCO, 2018. -/- Ao início da espermatocitogênese as uniões oclusoras entre as células de Sertoli se abrem por etapas (como as comportas de um submarino) para permitir a passagem das espermatogonias em direção ao centro do túbulo seminífero sem que se estabeleça uma continuidade entre o exterior e o interior da barreira hemato-testicular. Uma vez ultrapassada essa barreira, as sucessivas gerações de espermatogonias, espermatócitos, espermátides e espermatozoides irão se localizar em direção ao interior do túbulo seminífero, em estreita associação com as células de Sertoli. Em consequência, as células de Sertoli dividem o túbulo seminífero em dois compartimentos; o compartimento basal (debaixo das uniões oclusoras das células de Sertoli), ao qual residem as espermatogonias de reserva, e o compartimento adluminal (em direção ao centro do túbulo), cujos espaços entre as células de Sertoli desenvolvem o resto do processo de espermatogênese (meiose e espermatocitogênese). Esse feito é importante porque durante a vida fetal as únicas células germinais existentes eram as espermatogonias de reserva, pelo que os antígenos expressados por gerações mais avançadas (espermatogonias intermediárias, secundárias, espermátides e espermatozoides) não são reconhecidos como próprios do corpo pelo sistema imunológico. Logo, o anterior implica que deve existir uma barreira entre eles e o sangue para evitar um ataque imunológico. Em todas as etapas da espermatogênese, as células de Sertoli atuam como células de suporte para as células germinais, que sempre permanecem recoberta pela membrana das células de Sertoli. Também atuam como células nutricionais já que proporcionam o meio em que as células germinais se desenvolvem e maturam, assim como as substâncias que regulam e sincronizam as sucessivas divisões e transformações das células germinais. As células de Sertoli produzem hormônios, como estrógenos e inibina que atuam sobre a hipófise para regular a secreção das gonadotropinas que controlam a espermatogênese. As células de Leydig que residem no exterior do túbulo seminífero também são importantes para a espermatogênese: produzem a testosterona que estimula e mantém a espermatogênese, bem como serve como substrato sobre o qual atua como aromatizador das células de Sertoli para transformá-las em estrógenos. Como supracitado, para seu estudo podemos dividir a espermatogênese em três fase: espermatocitogênese, meiose e espermiogênese (figura 6). Agora, serão descritas cada uma dessas etapas. Em algumas espécies, incluindo no homem, os macrófagos representam o segundo tipo celular intersticial mais numeroso no testículo, depois das células de Leydig. Os macrófagos e vários subtipos de linfócitos são identificados nós testículos de ovinos e ratos. Eles estão intimamente associados com as células de Leydig e atuam juntamente na regulação da esteroidogênese. Figura 6: fluxograma da espermatogênese. -/- Espermatocitogênese -/- A espermatocitogênese, também chamada de etapa proliferativa ou de mitose, consiste numa série de divisões mitóticas sofridas pelas células descendentes de uma espermatogonia de reserva. Uma vez que a célula se divide, abandona o estado de reserva e começa um processo de diferenciação. As espermatogonias de reserva (denominadas espermatogonias A0 na rata ou As nos humanos) são células que existem desde a vida fetal e que permanecem mitoticamente inativas durante a infância. Uma vez que alcançam a puberdade começam a dividir-se em intervalos regulares, e as células filhas podem permanecer como espermatogonias de reserva ou abandonar a reserva e ingressar na dita espermatocitogênese. Uma vez abandonada a reserva, as células filhas que vão se formando em cada divisão permanecem unidas por pontes citoplasmáticas, constituindo um clone que se divide sincronicamente. As células que se formam depois de cada divisão continuam sendo espermatogonias, porém cada geração é ligeiramente diferente da anterior. Na rata, por exemplo, as espermatogonias tipo A0 ao dividir-se originam espermatogonias do tipo A1, que em sucessivas divisões formam espermatogonias dos tipos A2, A3 e A4, as quais, por sua vez, sofrem outra mitose para formar espermatogonias intermediárias e uma mais para formar espermatogonias do tipo B. Essas últimas se diferenciam (sem se dividir) em espermatócitos primários, processo em que termina a fase de espermatocitogênese, que literalmente significa processo de geração de espermatócitos. As espermatogonias tipo A0 são a fonte para a contínua produção de gametas. A metade delas se dividem e formam células iguais (as chamadas células tronco) e a outra metade forma as espermatogonias A1, que sofre novas divisões mitóticas e formam os tipos 2, 3 e 4. O tipo A4 sofre mitose para formar a intermediária (A In), que por mitose, forma a tipo B (figura 6). Esses tipos de espermatogonias podem ser identificadas em evoluções histológicas de acordo com sua organização topográfica na membrana basal dos túbulos seminíferos ou mediante seu conteúdo de heterocromatina. Outra maneira de diferenciação se baseia em marcadores moleculares específicos que distinguem as espermatogonias tronco (A0) das demais, com os fins de isolamento, desenvolvimento in vitro e transplante. As tipo B passam por mitose para formarem os espermatócitos primários; estes iniciam a primeira etapa da meiose formando os espermatócitos secundários; na segunda etapa da divisão meiótica, cada espermatócito secundário se divide e formam as chamadas espermátides. Quando o testículo alcança seu desenvolvimento total, a meiose completa-se e as espermátides originadas se convertem em espermatozoides. Um dos maiores sinais característicos desse fenômeno é o alargamento das espermátides e sua migração em direção ao lúmen do túbulo seminífero (figuras 4, 7 e 8). Figura 7: espermatogonias marcadas por imuno-histoquímica, anticorpo monoclonal TGFa (400 x). Figura 8: fases de divisões meióticas (M), espermatócitos em paquíteno (PA) e espermatócitos secundários (ES). -/- Figura 9: estádio posterior a liberação dos espermatozoides na luz do túbulo. Hematoxilina-eosina (400 x). Mediante as seis divisões mitóticas que ocorrem durante a espermatocitogênese se forma potencialmente um clone de 64 espermatócitos primários a partir de cada espermatogonia A que ingressa sobre o processo. Não obstante, algumas células sofrem apoptose em cada uma das etapas do processo, ao qual o número real formado é menor. Em outras espécies produzem-se um transcurso similar de divisões mitóticas sucessivas durante a espermatocitogênese, embora a nomenclatura utilizada possa ser distinta, por exemplo nos bovinos as duas últimas divisões mitóticas dão origem as espermatogonias de tipo B1 e B2. -/- Meiose -/- Uma vez que as espermatogonias B se diferenciam em espermatócitos primários, esses iniciam a etapa de meiose, com uma nova divisão; desta vez a divisão é do tipo meiótica. Ao completar-se a primeira divisão meiótica (meiose I) se obtém os espermató-citos secundários, que ao sofrer a segunda divisão meiótica (meiose II) dão origem as espermátides. Vale salientar que a meiose é o processo mediante o qual reduz-se a metade do número de cromossomos, pelo que as espermátides que se obtém são células haploides (1n). Os espermatócitos secundários que se formam depois da primeira divisão meiótica contém a metade do número normal de cromossomos, porém a mesma quantidade de DNA já que cada cromossomo é duplo. As espermátides formadas na conclusão da segunda divisão meiótica (figura 7), por sua vez, contém a metade dos cromossomos, e esse já não são duplos, já que se trata de células 1n. Também deve-se enfatizar que durante a meiose é relevante o entrecruzamento dos cromossomos homólogos, pelo que cada espermátide possui uma combinação única e diferente de genes paternos e maternos. Outro ponto que deve ser levado em consideração é que cada espermátide somente possui um cromossomo sexual; a metade das espermátides contém o cromossomo X herdado da mãe do macho que está levando a cabo a espermatogênese e a outra metade contém o cromossomo Y herdado de seu pai. Para cada espermatócito primário que entra no processo de meiose obtém-se cerca de quatro espermátides, pelo qual ao ser completada a meiose potencialmente se poderiam formar até 256 espermátides por cada espermatogonia que abandona a reserva e ingressa na espermatocitogênese. -/- Espermiogênese -/- Durante a espermiogênese, também chamada de fase de diferenciação, as esper-mátides sofrem, sem se dividir, uma metamorfose que as transforma em espermatozoides, os quais finalmente são liberados das células de Sertoli em direção ao lúmen do túbulo seminífero. A espermiogênese é um processo complicado e longo já que a espermátide deve sofrer complexas trocas nucleares, citoplasmáticas e morfológicas que resultam na forma-ção dos espermatozoides. Algumas dessas mudanças incluem a condensação do material nuclear para formação de um núcleo plano e denso, a eliminação do citoplasma para a constituição de uma célula pequena, a formação de uma estrutura especializada denomi-nada acrossomo ou tampa cefálica, e a formação do pescoço e da cauda (flagelo) do esper-matozoide, do que depende a sua motilidade. Durante a maior parte da espermiogênese, as espermátides se mantém com uma estreita associação com as células de Sertoli; logo, chega-se a observar, então, flagelos que se projetam em direção a luz do túbulo que pare-cem sair das células de Sertoli, sendo na realidade os flagelos dos espermatozoides que ainda não tinham sido liberados pelo lúmen. Ao liberar os espermatozoides em direção a luz do túbulo, as células de Sertoli realizam a fagocitose de parte do citoplasma dos espermatozoides (corpos residuais). Também fagocitam os restos de todas as células germinais que sofrem apoptose ou degeneram-se durante a espermatogênese. Credita-se que ao realizar essas funções as células de Sertoli podem fazer uma monitoração eficiente da espermatogênese, o que lhes permitiria emitir sinais para colaborar na regulação desse processo em nível gonodal e a nível sistêmico através da secreção de hormônios como a inibina e o estradiol. Além da inibina e activina, as células de Sertoli sintetizam outras proteínas, como a ABP (proteína ligadora de andrógenos) que serve como uma molécula de transporte de andrógenos dentro dos túbulos seminíferos, ductos deferentes e epidídimo, ou a transfer-rina, que transporta o ferro necessário para a respiração celular. -/- Resultados da espermatogênese -/- O resultado da espermatogênese não significa apenas uma simples multiplicação das células germinais (até 256 espermatozoides a partir de cada espermatogonia A1), senão que através dela são produzidos gametas haploides pequenos, móveis e com grande diversidade genética entre eles, ao mesmo tempo que se mantêm uma reversa de células mãe (espermatogonias A0) a partir das quais se poderiam originar novos ciclos de esper-matogênese durante o resto da vida do animal. -/- Controle hormonal da espermatogênese -/- Como mencionado, o FSH reproduz um importante papel para o estabelecimento das células de Sertoli durante a vida fetal e início da vida pós-natal. O começo da esper-matogênese também é estimulado pelo FSH, que atua sobre as células de Sertoli para estimular sua função e a ativação de sinais dessas células em direção as células germinais, incluindo-as a abandonar a reserva e ingressar na espermatogênese. O FSH, assim mesmo, estimula a mitose durante o resto da espermatogênese e aumenta a eficiência do processo, já que reduz a apoptose e a degeneração de espermatogonias intermediárias e do tipo B. O FSH também estimula as células de Sertoli para produzirem inibina e ABP. Uma vez iniciada a espermatogênese somente requerem níveis baixos de FSH para se mantê-la. As células de Sertoli também devem ser estimuladas pela testosterona para funcio-nar de maneira adequada; se requer também do LH hipofisário: hormônio que estimula as células de Leydig para produzir testosterona. Por sua vez, a secreção de LH e FSH é regulada pelo GnRH hipotalâmico: esse neurohormônio também faz parte do mecanismo de regulação da espermatogênese. A espermatogênese também é modulada em nível local mediante a produção de determinados fatores e interações entre as células. Dentro dos fatores locais podemos mencionar o fator de crescimento parecido com a insulina 1 (IGF-1), o fator de crescimen-to transformante beta (TGF- β), activina, ocitocina e diversas citocinas. Entre as intera-ções celulares existem tanto uniões de comunicação entre as células de Sertoli e as células germinais, como pontes citoplasmáticas entre todas as células germinais que formam o clone de células descendentes de uma espermatogonia A1. Uma vez que as células de Sertoli iniciam sua função na puberdade é possível manter experimentalmente a espermatogênese somente com testosterona, sem ser requeri-dos nenhum outro hormônio. A quantidade de espermatozoides produzidos, no entanto, é maior quando há presença do FSH. Abaixo do estímulo do FSH as células de Sertoli produzem estradiol e inibina, hormônios que geram uma retroalimentação sobre o eixo hipotálamo-hipofisário para a regulação da secreção de gonadotropinas. Em particular, a inibina reduz a secreção de FSH, pelo qual é factível que sirva como um sinal que evite uma excessiva estimulação as células de Sertoli. -/- Ciclo do epitélio seminífero -/- Em cada espécie as espermatogonias de reserva iniciam um novo processo de divi-sões celulares em intervalos fixos: a casa 14 dias no touro; 12 dias no garanhão e a cada 9 dias no cachaço (reprodutor suíno). A nova geração de células que começam a proliferar sobre a base do tubo deslocam-se em direção ao centro do túbulo a geração anterior, que por sua vez deslocam-se as gerações anteriores. Devido as mudanças que vão sofrendo cada geração celular se ajustam a tempos característicos de cada etapa, já que rodas as células em uma determinada seção do túbulo estão sincronizadas entre si pelas células de Sertoli; em cada espécie somente é possível encontrar um certo número de combinações celulares: 14 diferentes combinações no caso da rata, 8 no touro e 6 no ser humano. A sucessão de possíveis combinações até regressar a primeira combinação se conhece como o ciclo do epitélio seminífero. Na maioria das espécies os espermatozoides que são libera-dos em direção a luz do túbulo provém das células que entraram no processo de esperma-togênese quatro gerações antes que a geração que está ingressando nesse momento, pelo que a espermatogênese no touro dura ao redor de 60 dias e um pouco menos em outras espécies domésticas. Significa que os efeitos negativos das alterações na espermatogêne-se podem estar presentes até dois meses depois de que se produziram essas alterações. Como supracitado, geralmente se observa a mesma combinação celular em toda a área de uma determinada secção transversal do túbulo seminífero. No entanto, se fizermos uma série de secções, observa-se que ao longo do túbulo há uma sucessão ordenada de combinações (a primeira em uma determinada secção; a segunda combinação na seguinte secção, e assim sucessivamente em secções subsequentes até regressar a primeira combi-nação. Teremos, então, que ao início da divisão das espermatogonias A1 se produz de forma sincronizada em uma secção do túbulo, e vai-se transmitindo como uma onda peristáltica as secções adjacentes. Esse processo é denominado como onda do epitélio seminífero e graças à esse túbulo seminífero sempre tem secções em todas as etapas da espermatogênese, com o que se alcança uma produção constante de espermatozoides. -/- Alterações da espermatogênese -/- Nas espécies estacionais a espermatogênese, como já mencionado, pode reduzir-se ou inclusive suspender sua atividade fisiológica durante a época não reprodutiva dessas espécimes, porém esse processo fisiológico não pode ser considerado como uma altera-ção. No entanto, a espermatogênese só pode ser alterada pelas enfermidades ou por fatores externos. A principal causa de alterações na espermatogênese é o aumento da temperatura testicular. Por isso, os testículos são localizados na saco escrotal e são “caídos” para fora do corpo como pode-se observar nos bovinos, caprinos, ovinos, caninos e no próprio homem. A temperatura testicular deve estar cerca de 2 a 6 °C abaixo da temperatura corporal normal. As células germinais masculinas são sensíveis ao calor, pelo qual na maioria dos mamíferos os testículos se encontram fora da cavidade abdominal e existe um sofisticado sistema de termorregulação para mantê-los a uma temperatura menor que a corporal. Se a temperatura corporal for elevada ou se os testículos permanecerem na cavidade abdominal, ou ainda se os sistemas termorreguladores do testículo sejam afetados por fatores inflamatórios como edema ou falta de mobilidade testicular dentro do escroto, a temperatura do tecido testicular aumentará e a espermatogênese sofrerá alterações proporcionais ao excesso de temperatura e a duração da elevação. A espermatogênese também pode ser afetada pela exposição a hormônios ou a outras substâncias. É possível que a causa mais comum (sobretudo no homem) seja o uso de esteroides anabólicos, que elevam a concentração de andrógenos na circulação, provo-cando um feedback negativo sobre a secreção de gonadotropinas. Ao deixar de estimular-se o testículo pelas gonadotropinas, este deixará de produzir testosterona, e as concentra-ções de andrógeno exógeno nunca alcançará as altíssimas concentrações de testosterona que normalmente estão presentes a nível do tecido testicular por ser o local onde se produz o hormônio. Também se supõe que diversas substâncias com propriedades estrogênicas derivadas de processos industriais (indústria dos plásticos, hidrocarbonetos etc.) e presentes no ambiente (fatores xenobióticos) podem ser responsáveis pelas alterações na espermatogênese em diversas espécies, entre as quais se inclui o ser humano. -/- • OVOGÊNESE E FOLICULOGÊNESE -/- A ovogênese é o processo seguido pelas células germinais da fêmea para a forma-ção dos óvulos, que são células haploides. Durante a vida fetal as células germinais proliferam-se no ovário por mitose, formando um grande número de ovogonias, algumas das quais se diferenciam em ovócitos primários que iniciam sua primeira divisão meiótica para deter-se na prófase da divisão. Somente alguns desses ovócitos primários retornarão e concluirão a primeira divisão meiótica em algum momento da vida adulta do animal, dando origem a um ovócito secundário e a um corpo polar. O ovócito secundário inicia a sua segunda divisão meiótica, a qual volta a ficar suspensa até receber um estímulo apropriado, já que somente os ovócitos secundários que são ovulados e penetrados por um espermatozoide retornam e concluem a segunda divisão meiótica, dando origem a um óvulo (figura 10). O processo de ovogênese é realizado dentro dos folículos ovarianos, que também tem que sofrer um longo transcurso de desenvolvimento e diferenciação denominado foliculogênese pelo que a ovogênese como tal realiza-se dentro do marco desse último processo. Por essa razão, na seguinte seção descreverei tanto a ovogênese como a folicu-logênese, e a relação que existe entre ambos. Figura 10: representação da ovogênese. Na etapa de proliferação, as células germinais se diferen-ciam por mitose. A meiose I se caracteriza por uma prófase prolongada, ocorrendo a duplicação do DNA. Nas duas divisões, que ocorrem antes da ovulação e depois da fertilização, a quantidade de DNA é reduzida a 1n, com o fim de que a fusão dos pronúcles (singamia) pós-fertilização, seja gerado um zigoto com um número de cromossomos de 2n (diploide). -/- Geração de ovócitos primários e folículos primordiais Tanto a ovogênese como a foliculogênese iniciam-se durante a vida fetal, quando as células germinais primordiais provenientes do saco vitelino colonizam a gônada primitiva e, junto com as células somáticas z organizam-se para a formação dos cordões sexuais secundários, que se desenvolvem principalmente no córtex do ovário. Nesse período, as células germinais que colonizaram o ovário sofrem até 30 divisões mitóticas, proliferando-se até formar milhares ou milhões de ovogonias, que inicialmente formam “ninhos” constituídos cada um deles por um clone de várias ovogonias que descendem da mesma célula precursora e que se mantêm unidas por pontes citoplasmáticas, sincronizan-do suas divisões mitóticas. Nessa etapa alcança-se a máxima população de células germinais no ovário, que antes de nascer se reduzirá drasticamente por apoptose. No ovário do feto humano chegam a haver até sete milhões de células germinais que ao nascimento se reduzem a dois milhões. Os ovários fetais do bovino, de maneira análoga, chegam a ter até 2.100.000 células germinais, que ao nascimento reduzem para 130.000 aproximadamente. A redução no número de ovogonias produz-se ao mesmo tempo que essas células, que vêm dividindo-se por mitose e estão agrupadas em ninhos, iniciam sua primeira divisão meiótica para se transformarem em ovócitos primários: células germinais que se encontram em uma etapa de suspensão (diplóteno) da prófase da primeira divisão meiótica. Nesse período produz-se uma grande proporção de células germinais; as células somáticas dos cordões sexuais, por sua vez, emitem projeções citoplasmáticas que separam a isolam os ovócitos primários sobreviventes, ficando cada um deles rodeados por uma capa de células aplanadas da (pré) granulosa. Ao mesmo tempo em que se forma uma membrana basal entre as células da granulosa e o tecido intersticial do ovário. Ao ovócito primário rodeado de uma capa de células da (pré) granulosa aplanadas e delimita-das por uma membrana basal denomina-se de folículo primordial (figura 11). Nas vacas os folículos primordiais bem formados já estão presentes nos ovários a partir do dia 90 da gestação. A maioria dos folículos primordiais com os que nasce uma fêmea se manterão inativos durante um longo tempo; muitos deles durante toda a vida do animal. Nos folículos primordiais inativos tanto os ovócitos primários como as células da granulosa conservam sua forma original e mantém um metabolismo reduzido estritamente ao mínimo necessário para manter-se viáveis. Por essa razão, ao realizar um corte histológico de qualquer ovário as estruturas mais numerosas que se observam serão os folículos primordiais. No entanto, cada dia da vida de um animal, inclusive desde a vida fetal, um certo número de folículos primordiais reiniciam seu desenvolvimento, e a partir desse momento um folículo exclusivamente pode ter dois destinos: o primeiro, prosseguir seu desenvolvi-mento até chegar a ovular, e o segundo (que é muito mais frequente) encontrar em algum momento condições inadequadas que fazem fronteira com ele para parar seu desenvolvi-mento, levando-o a sofrer atresia e degenerar até desaparecer do ovário. Figura 11: sequência da foliculogênese apresentando as diferentes estruturas que podemos encontrar em cada fase. Fonte: ZARCO, 2018. Culminação da ovogênese A ovogênese somente se completará quando um ovócito primário reinicia a meio-se; completa sua primeira divisão meiótica para formar um ovócito secundário e um primeiro corpo polar e, quando, finalmente sofrer uma segunda divisão meiótica para formar um óvulo e um segundo corpo polar. Os óvulos são as células 1n que constituem os gametas femininos, pouco numerosos, grandes e imóveis. A grande maioria dos ovóci-tos primários, como veremos mais adiante, nunca retomam a meiose e, em consequência, não chegam a formar ovócitos secundários, e muitos dos ovócitos secundários tampouco sofrem uma segunda divisão meiótica, pelo que não chegam a formar os óvulos. Ao longo da vida de uma fêmea, na maioria das espécies, menos de 0,1% dos ovócitos primários (um a cada mil) chega a terminar a ovogênese, dando origem a um óvulo. O supracitado deve-se a que a ovogênese somente pode retomar-se e ser completa-da em ovócitos primários que se encontram dentro dos folículos primordiais que (uma vez ativados) vão alcançando diversas etapas de seu desenvolvimento em momentos precisos aos que encontram as condições ideais de oxigenação, nutrição, vascularização e exposição a fatores parácrinos e a exposição a concentrações de hormônios que se requerem para que o folículo continue em cada etapa de seu desenvolvimento com o processo de foliculogênese até chegar a ovular. Qualquer folículo que não esteja nessas condições ao longo do desenvolvimento sofrerá degeneração e atresia, pelo que o ovócito primário em seu interior nunca chegará ao ponto em que pode retomar a primeira divisão meiótica. No que resta da presente seção revisaremos o processo de foliculogênese em cujo marco se desenvolve a ovogênese; havemos que tomar de conta que essa última se limita ao que ocorre nas células germinais (ovogonia, ovócito primário, secundário e óvulo), pelo qual depende intimamente do desenvolvimento do folículo de que essas células formam parte. Em um princípio a ativação do folículo primordial e o desenvolvimento folicular são independentes das gonadotropinas: não se conhecem os mecanismos precisos median-te os quais um folículo primordial se ativa e reinicia seu desenvolvimento, nem como se decide quais folículos, dentre as dezenas de milhares de ou centenas de milhares presentes em um ovário se reativarão em um dia em particular. A reativação trata-se de uma liberação de influência de fatores inibidores, já que os folículos primordiais se reativam espontaneamente quando cultivados in vitro, isolados do resto do tecido ovariano. Uma vez que um folículo primordial se ativa, inicia-se um longo processo de desenvolvimento que somente depois de vários meses (ao redor de cinco meses no caso dos bovinos) o levará a um estádio em que seu desenvolvimento posterior requer a presença das gonado-tropinas; daí que se diz que as primeiras etapas do desenvolvimento são independentes das gonadotropinas. Durante a fase independente de gonadotropinas, um folículo primordial que tenha sido ativado e tenha começado a crescer; passará primeiro para a etapa de folículo primá-rio, caracterizada por conter um ovócito primário que está rodeado, por sua vez, por uma capa de células da granulosa, que não são planas, e sim cúbicas. Depois, se o folículo continuar crescendo se transformará em um folículo secundário, ao qual as células da granulosa começam a proliferar (aumentando em número) e se organizam em duas ou mais capas que rodeiam o ovócito primário. Entre o ovócito e as células da granulosa que o rodeiam se forma nesta uma zona pelúcida; ainda assim o ovócito mantém contato direto com essas células, mediante o estabelecimento de pontes citoplasmáticas que atravessam a zona pelúcida. Através dessas pontes citoplasmáticas as células da granulosa podem passar nutrientes e informação ao ovócito primário. O volume e o diâmetro do ovócito primário aumentam ao mesmo tempo que as células da granulosa proliferam-se, para incrementar as capas ao redor do ovócito. De maneira gradual o citoplasma do ovócito primário aumenta até 50 vezes seu volume e a proliferação das células continua. Esses folículos que possuem cada vez mais células e portanto mais capas de células da granulosa se denominam folículos secundários. Para evitar confusões, há a necessidade de nomen-clatura ao qual o folículo vá mudando de nome de primordial a primário e logo, de secun-dário, a terciário, por sua vez, o ovócito que encontra-se em seu interior, a todo momento, segue sendo um ovócito primário. Durante a etapa dependente de gonadotropinas, os folículos secundários começam a formar um espaço cheio de líquido, o antro folicular, desse modo se convertem em folí-culos terciários. Com a utilização de outra nomenclatura, a formação do antro marca a transição entre folículos pré-antrais (sem antro) e folículos antrais (com antro). Em algum momento dessa transição entre folículo secundário e terciário, também aparece a depen-dência de folículos em direção as gonadotropinas, pelo qual somente podem seguir crescendo na presença do hormônio luteinizante (LH) e do hormônio folículo estimulante (FSH). Nos bovinos e em outras espécies (para seu estudo), os folículos antrais são dividi-dos em pequenos, médios e grandes. Embora todos eles possuam um antro folicular, dependendo do seu grau de desenvolvimento requerem diferentes concentrações de gona-dotropinas para continuar o crescimento. Os folículos antrais mais pequenos somente re-querem concentrações baixas de LH e FSH, pelo qual podem continuar crescendo em qualquer momento do ciclo estral inclusive em animais que não estão ciclando (fêmeas em anestro pré-puberal, gestacional, lactacional, estacional). Nas etapas posteriores os folículos antrais requerem primeiro concentrações elevadas de FSH, e nas etapas finais somente podem continuar crescendo na presença de pulsos frequentes de LH, pelo qual somente os folículos que encontram-se sob concentrações apropriadas desses hormônios podem seguir crescendo. Por essa razão, nos animais que se encontram em anestro de qualquer tipo somente é possível encontrar folículos antrais pequenos ou médios, segundo a espécie, e nos animais que se encontram ciclando (estro) o maior tamanho folicular encontrado em um determinado dia do ciclo dependerá das concentrações de FSH e LH presentes nesse momento e nos dias anteriores. Um folículo que chega ao estado máximo de desenvolvimento, conhecido como folículo pré-ovulatório, ao final, somente chegará a ovular se for exposto a um pico pré-ovulatório de LH. Como supracitado, cada dia na vida de uma fêmea inicia seu desenvolvimento um certo número de folículos; a grande maioria sofrem atresia, mas depois da puberdade em cada dia do ciclo estral um ou vários folículos vão encontrando ao longo do seu desenvol-vimento concentrações hormonais que lhes permite chegar na etapa de folículo pré-ovula-tório. Somente nestes folículos, e como consequência de um pico pré-ovulatório de LH, se reinicia e completa-se a primeira divisão meiótica do ovócito primário, produzindo duas células distintas. Uma delas é o ovócito secundário, que retém praticamente todo o citoplasma. Contém, assim mesmo, em seu núcleo um par de cromossomos duplos, a outra é o primeiro corpo polar, que é exclusivamente um núcleo com uma quantidade mínima de citoplasma. Na maioria das espécies ovula-se um ovócito secundário que se encontra, então, suspendido na segunda divisão meiótica. Esta segunda divisão meiótica somente reinicia-rá e completarar-se uma vez que o espermatozoide começa a penetrar sob o ovócito secundário. Ao concluir-se a divisão se forma o segundo corpo polar e completa-se a ovogênese com o qual se obtém o óvulo, célula 1n que constitui o gameta feminino. No entanto, o óvulo existe pouco tempo como tal, já que em poucos minutos/horas (depen-dendo da espécie) se produzirá a fusão do núcleo do mesmo (pró-núcleo feminino) com o do espermatozoide (pró-núcleo masculino), com o qual se completa a fertilização e se forma um novo indivíduo (o ovo ou zigoto). -/- Ondas foliculares -/- Como mencionado supra, todos os dias um determinado número de folículos pri-mordiais se ativam e começam a crescer, os quais crescem em um ritmo característico em cada espécie. Isso provoca que em qualquer momento existam nos ovários folículos pri-mordiais (que começam a crescer em alguns dias ou semanas), assim como folículos secundários em diversas etapas do desenvolvimento, os quais iniciaram seu desenvolvi-mento em semanas ou inclusive meses (segundo o grau de desenvolvimento atual). Também em qualquer momento poderá haver folículos antrais nas etapas iniciais de seu desenvolvimento (com antros que já se podem detectar em cortes histológicos mas não são visíveis macroscopicamente). Todos esses folículos chegaram até seu estado de de-senvolvimento atual (primário, secundário ou antral pequeno), independente da etapa do ciclo estral em que sejam observados ou encontrados. Nos bovinos, os folículos que chegam ao início da etapa antral iniciaram seu desenvolvimento cinco meses antes, e todavia requerem ao redor de 42 dias para chegar ao estado pré-ovulatório. Para continuar seu desenvolvimento, os folículos antrais pequenos devem encon-trar concentrações altas de FSH, que os estimulam para prosseguir o crescimento. Cada vez que se produz uma elevação nas concentrações de FSH, esse hormônio estimula o desenvolvimento de um grupo de folículos antrais pequenos, que começaram a crescer muito tempo antes e que o dia da elevação de FSH tenha alcançado o grau de desenvolvi-mento preciso para responder com eficiência a este hormônio, o qual atuará através de seus receptores nas células da granulosa para estimular a produção de estradiol, a secreção de inibina, a produção de líquido folicular e a proliferação das células da granulosa. Um grupo de folículos antrais pequenos é assim recrutado pelo FSH para acelerar seu cresci-mento e aumentar sua produção de estradiol e inibina (figura 12). Mediante um seguimento ultrassonográfico dos ovários é possível identificar pou-cos dias depois um certo número de folículos, que por haver sido recrutados começam um período de crescimento acelerado. Durante alguns dias vários folículos crescem juntos, porém depois um deles é selecionado para continuar crescendo, enquanto que o restante do grupo deixam de fazê-lo e terminam sofrendo atresia. Através da ultrassom é possível identificar o folículo selecionado, agora chamado folículo domi-nante, já que sua trajetória de crescimento sofre um desvio com respeito a seguida pelo restante do grupo. Os folículos que não foram selecionados deixam de crescer e sofrem atresia já que deixam de possuir o suporte gonadotrópico de FSH, uma vez que as concentrações desse hormônio são suprimidos pela inibina e o estradiol produzidos pelo conjunto de folículos que conformam a onda folicular (figura 12), porém o folículo mais desenvolvido do grupo se converterá em dominante. A inibina atua diretamente a nível hipofisário para reduzir a secreção de FSH. Figura 12: onda folicular e relação dos níveis de FSH, estradiol e LH. Fonte: ZARCO, 2018. -/- Figura 13: Recrutamento, seleção e dominação folicular na espécie ovina e influência do FSH e LH nas fases. Fonte: SILVA, E. I. C. da, 2019. -/- A razão pela qual o folículo dominante é capaz de continuar seu desenvolvimento apesar da baixa nas concentrações de FSH é que o folículo é o único que alcançou o grau de progresso necessário para que apareçam os receptores para LH em suas células da granulosa. Esse processo permite ao folículo dominante ser estimulado pela LH, e que requeira baixas concentrações de FSH para manter seu desenvolvimento. A secreção de LH em forma de pulsos de baixa frequência (um pulso a cada quatro a seis horas), característica da fase lútea do ciclo estral; é suficiente para permitir que um folículo dominante continue crescendo por mais dias depois da sua seleção e que mais tarde mantenha-se viável durante alguns dias embora não aumentem de tamanho. Contu-do, se durante o período viável desse folículo não seja finalizada a fase lútea e não diminuam as concentrações de progesterona, o folículo terminará sofrendo atresia devido a exigência de um padrão de secreção acelerada de LH (aproximadamente um pulso por hora) durante o desenvolvimento pré-ovulatório, que somente pode ser produzido com a ausência da progesterona. Uma vez que um folículo dominante sofre atresia deixa de produzir inibina, pelo qual as concentrações de FSH podem elevar-se novamente para iniciar o recrutamento de outro grupo de folículos a partir da qual se origina uma nova onda folicular. Durante o ciclo estral de uma vaca podem gerar-se dois ou três ondas foliculares; somente em raros casos quatro. A etapa de dominância folicular da primeira onda na grande maioria dos casos não coincide com a regressão do corpo lúteo, pelo qual o primei-ro folículo dominante quase invariavelmente termina em atresia. Em algumas vacas o fo-lículo dominante da segunda onda ainda está viável quando se produz a regressão do corpo lúteo e acelera-se a secreção de LH, pelo qual esse segundo folículo dominante se converte em folículo pré-ovulatório e, ao final ovula. Em outros animais o segundo folícu-lo dominante também perde a sua viabilidade antes da regressão do corpo lúteo, por onde nesses animais se inicia uma terceira onda folicular, da qual surge o folículo que finalmen-te ovulará depois de produzir-se a regressão do corpo lúteo. Sem importar a onda em que se origine, uma vez que um folículo dominante é ex-posto a alta frequência de secreção de LH que se produz depois da regressão do corpo lúteo, aumenta ainda mais sua secreção de estradiol até que as altas concentrações desse hormônio comecem a exercer um feedback positivo para a secreção do LH. Isso provoca-rá a aceleração da frequência de secreção do LH até que os pulsos são tão frequentes que começam a ficar por cima e produzir-se o pico pré-ovulatório de LH, que é responsável pela realização da ovulação e a maturação final do ovócito. -/- •___DIFERENÇAS ENTRE ESPERMATOGÊNESE E OVOGÊNESE -/- Enquanto que na fêmea a ovogênese inicia-se durante a vida fetal, no macho a es-permatogênese começa na puberdade. Na fêmea, a partir de um ovócito primário se origi-na um óvulo; no macho, de um espermatócito primário se produzem, teoricamente, quatro espermatozoides. Outra característica interessante é que enquanto a fêmea já conta desde o nasci-mento com todos os ovócitos que necessitará na vida adulta, o macho necessitará chegar a puberdade para iniciar o desenvolvimento das células sexuais, já que ao nascer somente possui gonócitos precursores das células germinais, células de Sertoli e intersticiais. Na vida adulta de uma fêmea, o número de células germinais desaparece paulati-namente. Uma vez iniciada a espermatogênese no macho, a cada ciclo do epitélio seminí-fero as células germinais são renovadas mantendo a provisão para toda a vida reprodutiva. Na fêmea, a meiose sofre duas interrupções em seu transcurso, e no macho é ininterrupta. Figura 14: representação em diagramação comparativa do desenvolvimento da gametogênese. -/- Principais pontos abordados sobre as diferenças entre a gametogênese masculina e feminina: ❙ Na ovogênese a meiose contêm-se em duas ocasiões esperando acontecimentos externos para prosseguir. Já na espermatogênese não existe a suspensão da meiose. ❙ A espermatogênese é um processo contínuo, enquanto que a ovogênese pode completar exclusivamente um óvulo em cada ciclo estral; já que só pode ser completada por mais de um nas espécies que ovulam vários ovócitos no caso das porcas, cadelas, gatas etc. ❙ Na espermatogênese existem células de reserva que permitem a continuação du-rante toda a vida, enquanto que na ovogênese o número de ovócitos primários é limitado. A fêmea somente conta com os que nasceu, e eles não se dividem. ❙ Na espermatogênese obtém-se até 256 espermatozoides para cada espermatogo-nia que inicia o processo, enquanto que na ovogênese somente se obtém um óvulo a partir de cada ovócito primário. ❙ Durante a espermatogênese se produz uma metamorfose que transforma as es-permátides em espermatozoides. Na ovogênese não ocorre um processo análogo. ❙ Na espermatogênese, durante a meiose produzem-se quatro espermátides a partir de cada espermatócito primário. Na ovogênese se produz somente um óvulo a partir de cada ovócito primário; produz, ademais, dois corpos polares. ❙ Todos os óvulos que se produzem durante a ovogênese contém um cromossomo X, enquanto que a metade dos espermatozoides possuem um cromossomo Y e a outra metade um cromossomo X. ❙ Na espermatogênese produzem-se centenas ou dezenas de milhões de esperma-tozoides por dia, enquanto que na ovogênese se produz um ou alguns óvulos a cada ciclo estral. ❙ A espermatogênese produz gametas macroscópicos e com motilidade própria, enquanto que a ovogênese produz gametas grandes e imóveis. -/- REFERÊNCIAS BIBLIOGRÁFICAS -/- ABDEL-RAOUF, Mohammed et al. The postnatal development of the reproductive organs in bullswith special reference to puberty.(Including growth of the hypophysis and the adrenals). Acta endocrinologica, n. Suppl No. 49, 1960. ADONA, Paulo Roberto et al. Ovogênese e foliculogênese em mamíferos. Journal of Health Sciences, v. 15, n. 3, 2013. AERTS, J. M. J.; BOLS, P. E. 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The paper examines the validity of the apostolic ministry in our day, its relationship to missionary work, and how it relates to missionaries who have shown characteristics of an apostolic ministry. In this paper, the ministry of John Bueno who showed these characteristics and his work in El Salvador is also briefly studied. For the purpose of a better framework of reference, the paper also explores different positions that may express radical postures such as apostolic succession and the apostolic (...) reformation of the Church. Then, ponder if such positions are ineludible ways to accomplish the work of the Church, or if the understanding of an apostolic function will suffice for the health of the Church. (shrink)